Hola, soy Irene Cerdas, soy Sex Coach y estoy atravesando un duelo por una ruptura. Por eso, mi libido anda bastante baja. ¿Has tenido o tienes bajo deseo sexual? Entonces, este artículo es para ti. Leelo para conocer mis consejos personales y profesionales, para vivir una vida erótica y atravesar mejor aquellos momentos en los que tu libido desaparece.
Por Irene Cerdas
Soy Irene Cerdas, fotógrafa profesional, con estudios en arte, terapia y sex coach certificada. Mi trabajo se enfoca en dar la información necesaria porque creo en la importancia de la educación sexual y que todas las personas tienen derecho a una vida sexual sana y placentera. ¡Básicamente, me convertí en la persona que yo necesitaba para aprender sobre mi sexualidad!
¿Qué pasa con el sexo al romper una relación de pareja?
Cuando estamos conociendo a alguien, ya en pareja, o disfrutando la soltería, resulta más fácil hablar o pensar en sexo, pero: ¿qué pasa cuando acabamos de terminar una relación? ¿Esas semanas, meses o años en el que sentimos que estamos apagadas, que no nos interesa, que la libido está por el piso, que el autoplacer ni se nos pasa por la cabeza, o que nos entristece pensar que no volveremos a tener el mismo sexo que teníamos con nuestra pareja?
Claro que no siempre ni para todas es así. Hay quienes desde un principio disfrutan de volver a conocer gente nueva, ir a citas, sexo casual, abrir alguna app, etc. Y eso también está bien. Ya que depende de cómo y por qué terminó la relación, como era el sexo con esa pareja. También es cuestión de personalidades, gustos y preferencias.
Las autoexigencias de ser sex coach y baja libido
Para este artículo hablaré desde mi experiencia, sintiéndome más cómo describo en el primer párrafo, siendo sex coach y por primera vez encontrándome en una situación diferente. Les cuento por qué.
Primero, mi ruptura fue hace dos meses, una relación que duró casi 4 años y medio con un hombre maravilloso, pero al final tomamos la decisión de no continuar porque queríamos cosas diferentes. Esta fue, de hecho, mi primera relación no-monógama. Y la primera relación en la cual desde la segunda cita fuimos claros en nuestras intenciones, quizás la más importante era que si algún día esto acababa sería con mucho amor, respeto y honrando la amistad que teníamos. Así fue, por lo que me siento muy orgullosa de la relación y de mi crecimiento personal, sobre todo porque ninguna de mis relaciones pasadas terminó así.
Por otro lado, uno muy importante para mí, era que el sexo era Í-N-C-R-E-I-B-L-E. En 4 años cada vez se ponía mejor, claro que eso se debe al esfuerzo intencional que le poníamos.
Digo situación diferente porque es la primera vez, desde que me cambié de profesión, me certifiqué como sex coach y hago de mi día a día hablar de sexo y relaciones, que estoy pasando por el duelo de una ruptura con mucho más conocimiento y a la vez presión a mí misma.
Porque pasa lo típico, se nos hace fácil aconsejar y recomendar, pero a veces se nos olvida a nosotros hacer eso mismo. Mi situación ha sido precisamente esa. Me encontré diciéndome: “Yo debería saber qué hacer, solo porque terminé no significa que mi vida sexual acabó.”
Me repito y recuerdo todo lo que les digo a mis clientes:
- “El autoplacer es superimportante y estar solteras es un excelente momento para aprovechar conocerte”
- “Tu placer y vida sexual no dependen ni están sujetas a estar en pareja”
- “El mejor sexo siempre será con vos misma”
- “Si quiero mejorar algo en mi vida sexual o conocerme sexualmente, lo ideal es en la masturbación”
Pero la verdad es que por más que supiera que esto es cierto, no resonaba conmigo. Sencillamente, no me daba ganas, es como que ni me pasaba por la cabeza. Solamente durante la ovulación se despertaba ciertas ganitas, pero ya. En un momento de frustración por autoexigirme, y autocriticarme de porque me sentía así, de que si soy sex coach debería estar aprovechando, explorando sabiendo que hacer, me puse a reflexionar sobre esto. Recordé tres consejos claves.
- Recordar la importancia de la auto-compasión. Decirme a mí misma que estoy haciendo lo mejor que puedo. Así de sencillo. Voy a tener días buenos y días no tan buenos, lo importante es el proceso y la experiencia de lo que estoy aprendiendo.
- Está bien no tener ganas. Es natural que al estar tristes, pasando un duelo, una depresión o cualquier otro momento difícil en nuestras vidas, que el sexo no sea prioridad o que el deseo sea bajo. Nuestro cuerpo y mente sencillamente no consideran que sea el mejor momento para la actividad sexual, y eso hay que entenderlo, aceptarlo y naturalizarlo. No es un estado permanente. Recordar qué emocional, mental, energética, física, espiritual y psicológicamente estamos pasando por mucho, así que quizás no sea el momento para entrar de una a la exploración auto-erótica o al sexo casual y las citas. Antes que todo eso, es preferible ir con calma, entender por el momento que estamos pasando y darnos lo que necesitamos. Esto puede ser desde ver pelis comiendo palomitas y pidiendo pizza, salir de fiesta con amigas, llorar por horas, escribir en un diario nuestros pensamientos, empezar un nuevo proyecto, o a veces dormir unas horas extra. Cualquier cosa que nos ayude a sentir las emociones para dejarlas ir.
- Entender que el deseo se cultiva. Es un concepto que SIEMPRE hablo, ya sea en pareja o no, porque el sentir placer e invitarlo cada vez a nuestras vidas es clave para nuestra sexualidad y nuestro deseo.
Cultivar tu deseo no es (solo) pensar en sexo
Erróneamente, muchas personas al pensar en placer, inmediatamente piensan “sexual” y esa asociación debe ser mucho más amplia. El placer puede sentirse de muchas maneras estimulando nuestros cinco sentidos: al comer, escuchar música, bailar, texturas, colores, aromas, un abrazo, sensaciones como meter los pies en el mar o una brisa refrescante…
Hay placer en una conversación de horas con un ser querido o en una mesa de amigos. Sentimos placer cuando solucionamos un problema, creamos arte, cuando se nos ocurre una idea para un proyecto. Cuando reímos, pasamos tiempo en familia, escuchamos una buena noticia, cuando vemos un atardecer o estamos en la naturaleza.
Esther Perel dice "el erotismo no es el sexo en sí, sino las cualidades de vitalidad, curiosidad y espontaneidad que nos hacen sentir vivos. (...) es una experiencia de vitalidad que hace retroceder a la muerte”.
Cómo vivir una “vida erótica”
Yo he llegado a explicarlo como “vivir una vida erótica” en la cual pongo atención e intención a las cosas que me brindan placer. Entre ellas, pequeños momentos que despiertan mi energía sexual.
Hago cosas como…
- Permitirme comer lo que se me antoja,
- Hacer alguna actividad física que disfruto como bailar, o bien pruebo algún ejercicio nuevo para ver si a mi cuerpo le gusta,
- Hago planes con amigas y amigos,
- Me doy espacios para no hacer nada,
- Me llevo a cenar o tomar un café sola,
- O salgo a trabajar a una cafetería en vez de la casa,
- Me alisto bien guapa, aunque nadie me vea, me hace sentir sexy e irresistible
- Si veo a alguien atractivo, intento hacer contacto visual, cortito, pero obvio, y eso enciende esa llamita. Si me siento atrevida, le sonrío.
- Cuando salgo a cualquier mandado, me visto y maquillo un poco y camino como si fuera la mujer más guapa del mundo.
- Duermo desnuda y todas las mañanas agradezco por lo que tengo y por mi cuerpo que está saludable y que es bello por dentro y por fuera.
- Me tomo fotos sexis cuando me gusta la luz
- Me paso de tiempo viendo reels de algún actor o modelo que me parece guapo
- Me corto el pelo, o me lo tiño, o me compro algo nuevo para mí
- Me salgo de mi zona de confort y me pongo ese vestido que antes no me atreví
- Salgo a ver el sol, y la luna y las estrellas
- Bailo sola bajo la luz de las candelas, desnuda o con un vestido largo y el pelo suelto, e invoco a esa mujer poderosa y salvaje que tengo.
- Me veo al espejo, me sonrío, me guiño un ojo y me tiro un beso y me digo hermosa
- Hago manualidades, escribo.
- Fantaseo
- Invierto en mí, en mi casa, mi espacio, mi futuro, mi trabajo
Vivir una vida erótica no implica solamente lo sexual, implica todo lo que me hace sentir viva, sexy, presente y hermosa. Aun en días tristes, en algo busco el placer o el agradecer. No digo que tengan que hacer todo eso, busquen lo que a ustedes les genera placer, goce y disfrute. Solución rápida y mágica no es, pero se trata de aprender a vivir de una manera diferente, de ver y experimentar la vida desde otra perspectiva. Al estar en pareja esto es algo maravilloso de compartir, y al estar solas es maravilloso de tener. Cuanto más placer y bienestar tenemos, más lo buscamos.
Mientras escribo esto, no puedo decir que mi libido ha vuelto a mi normal, pero sí he tenido más momentos de auto-placer, de pensamientos y de fantasías, aunque no me sienta al 100 % sé que estoy haciendo lo mejor para mí: no autoexigiéndome, permitiéndome sentir, y viviendo eróticamente.
¿Cómo son tus momentos de autoplacer más allá del sexo? ¿Tienes una vida erótica? ¡Comparte tus trucos para el autocuidado en el foro!
¿Ya conoces JOYclub?
¡Ingresa en nuestra exclusiva comunidad y disfruta de tu deseo!
En JOYclub te espera una gran comunidad que te ayudarán con consejos fascinantes que cambiarán completamente tu vida sexual. NO importa si eres hombre, mujer, trans, soltero o pareja - ¡vive tus fantasías con JOYclub! ¡Te estamos esperando!
Entra gratuitamente en JOYclub