Para muchas parejas, la doble penetración es otra forma de disfrutar aún más de sus relaciones sexuales. Si un pene ya provoca sensaciones estupendas, entonces dos deberían proporcionar el doble de placer, ¿verdad? Explicamos por qué a nuestros usuarios les fascina la doble penetración, qué posibilidades existen en este tipo de juego y a qué se debe prestar atención.
Doble penetración: la preparación correcta
Hay dos aspectos importantes en la preparación para la doble penetración: lubricante y paciencia. A pesar de que el cuerpo humano es capaz de muchas cosas desde el punto de vista anal y vaginal, se deben respetar los límites anatómicos. La vagina y el ano se deben preparar poco a poco para esta práctica dilatándolos repetidamente —por ejemplo, usando los dedos y juguetes sexuales— y aplicando mucho mucho lubricante.
Además, no os olvidéis del sexo seguro: cuando dos penes envueltos en condones se rozan al mismo tiempo en la vagina o el ano, es posible que se rompan. Por ello, también debéis vigilar que haya suficiente lubricante entre los penes durante el sexo o comprobar mediante un chequeo médico que todos los involucrados están sanos para poder disfrutar de la experiencia sin condones.
Doble penetración: estas son las variantes
☆ El sándwich: vaginal y anal al mismo tiempo
La forma más conocida de doble penetración y, al mismo tiempo, el juego más popular durante un trío. Un hombre estimula a la mujer por la vía vaginal, el otro por la vía anal. Al igual que en el sexo (anal) normal, la mujer ya debería estar suficientemente dilatada antes de comenzar. Según la postura, uno de los hombres estará más activo que el otro, ya que tres personas en la cama restringen bastante la libertad de movimientos. A continuación hemos resumido qué posturas son las más adecuadas para este y otros tipos de doble penetración. Así os evitareis discusiones en la cama.
Por favor, tened en cuenta: ¡si las dos partes activas quieren cambiar su posición, deberíais usar necesariamente nuevos condones para que las bacterias del ano no lleguen a la vagina!
☆ Vaginal doble: dos penes en una vagina
La doble penetración vaginal significa que, durante el acto sexual, dos penes estimulan la vagina. Para ello, en primer lugar se introduce un pene y después se dilata poco a poco la vagina con varios dedos para hacer sitio al segundo pene. En este tipo de doble penetración, las mujeres también disfrutan del placer de «sentirse llenas».
En este tipo de juego, al igual que en el caso de la doble penetración anal, deberíais tener en cuenta que puede ser necesario algo de tiempo hasta que los dos penes hayan encontrado su sitio en la vagina y que, en determinadas circunstancias, uno de los hombres podría haber perdido su erección. Reservad suficiente tiempo y ganas para el primer intento, ¡así lo lograréis!
☆ Anal doble: dos penes en el ano
De forma análoga a la penetración vaginal doble, también existe la penetración anal doble. Los expertos del sexo anal saben cómo deben dilatar su ano para que el sexo sea agradable e indoloro. Para la doble penetración, debéis dilatar un poco más el ano, idealmente con dos o tres dedos, cuando uno de los penes ya haya sido introducido. Si la parte pasiva ya no siente dolor, podéis introducir con cuidado el segundo pene. Utilizad mucho lubricante y sed precavidos.
Quienes teman encontrarse con sucias sorpresas durante la doble penetración anal pueden limpiar su ano antes del sexo. Es suficiente utilizar algo de jabón e introducir suavemente un dedo. No os hagáis un enema, ya que solo eliminan depósitos profundos a los que ningún pene llega fácilmente.
La mejor postura para la doble penetración
Al pensar en la doble penetración, uno se imagina inmediatamente la postura de la amazona: un hombre está tumbado sobre su espalda, la mujer se sienta sobre él e introduce el pene en la vagina o el ano. Si a continuación se inclina hasta que su torso repose sobre el del hombre debajo de ella, el segundo hombre puede arrodillarse tras ellos e introducir también su pene en la abertura deseada.
Esto también se puede realizar en la postura de la vaquera inversa, en la que la mujer se coloca sobre el hombre tumbado dándole la espalda y después se tumba con la espalda sobre el torso de él.
¿Y qué te parecería probar algo totalmente distinto? La penetración doble también se puede llevar a cabo estupendamente en la postura de la cuchara y, en este caso, está especialmente cargada de sensaciones, ya que todos los participantes se pueden tumbar de lado relajadamente sobre la cama. Quienes prefieran algo un poco más inusual, también pueden probar la doble penetración mientras están de pie. La mujer se sitúa frente a un hombre y el segundo se coloca detrás de ella. Después, ambos levantan a la mujer y la sostienen sujetándola por debajo de las rodillas para que no tenga contacto con el suelo durante el sexo. ¡Esta postura es solo para los más resistentes!
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