En el parque
Era ya tarde, habíamos tenido una cita en un parque cercano, paseamos durante el día, fuimos a comer y regresamos a caminar, para terminar la cita, se veía hermosa usaba falda corta, medias a los muslos y una blusa con escote en V no podía dejar de verlos en todo el día, era nuestra segunda cita, pero hablábamos como si nos conociéramos de toda la vida, bromeando sobre el trabajo y la gente, el reloj marcaba las 7 pm empezaba a oscurecer y a encender las luces de los senderos, se veía un panorama romántico, ella sujetaba mi brazo, podía sentir un poco su pecho contra el, no podía evitar pensar en lo suaves que se sentía a pesar del bra qué usaba, continuamente pensaba en la sensación que tendría si los tocaba directamente, su voz apartó el pensamiento de repente - disculpa, pensaba en otra cosa, me decías? - ella sonrió un poco - te decía que si podíamos buscar un baño - yo conteste que si, caminamos a los baños y mientras fantaseaba con que entramos los dos y nos tocabamos en un cubículo, llegamos al baño y ella entró, yo espere afuera mientras veía las notificaciones de mi celular, nada interesante, cuando salió levante la mirada, dio un paso algo exagerado y note que no traía el short corto debajo de la falda, me excite un poco pensando en que tipo de ropa interior traería, ya que con la iluminación y lo poco que se levantó la falda no llegue a verla, - todo bien? - pregunté, ella asintió con la cabeza mientras se acercaba más, de repente caí en cuenta que su pecho se movía libremente, lo que significaba qué tampoco traía bra, cuando llegó junto a mi se acercó y me dijo con voz baja - tengo una sorpresa para ti - tomo mi mano y me entrego su bra, lo apreté y escondí rápidamente, sentía una mezcla de pena y excitacion, cuando metí mi mano con el bra a mi chamarra sentí un pequeño bulto cuadrado entre las copas, lo examine con el tacto de mis dedos, note tres botones qué sobresalian, abrí más los ojos y ella rio un poco - creíste que la sorpresa sería mi bra? - eso me hizo sonreír con satisfacción, precione un botón al azar, no pasó nada, precione el segundo y dio pequeño brinco, imagine que se había encendido lo que trajera puesto, mi imaginación volaba pensando en cual sería el pequeño juguete que traería en su ropa interior, una duda llego de golpe a mi - quitaste tambien tu ropa interior? - lo pregunté sin pensar, ella sonrió - aún traigo lo de abajo - levanto su falda lo suficiente para que una pequeña parte de ella se viera, note un patrón de encaje muy lindo en color rosa y gris, precione un segundo botón, - lo apagaste - me lanzó una mirada de decepción y provocación - hora ya se como funciona - le dije sonriendo y sacando mi mano con el control de mi bolsa, lo examine y lo cambie a la bolsa contraria, metí mi mano para tenerlo listo, con la otra la invite a seguir caminando, cada vez había menos gente y oscurecia más, caminamos un poco - no la usaras? - dijo con expectación - en algún momento - contesté desafiante, levantó sus hombros y suspiro, iba a decir algo más cuando encendí el juguete, dio un brinco y un murmullo salió de su boca - me acabas de decir "desgraciado"? - ella volteo y me lanzó una mirada entre excitada y molesta - perdón, pero me tomaste desprevenida - reí un poco tomándola del brazo - esa es la idea, o me equivoco? - siguió caminando mientras jugaba con el control, subía la intensidad, la bajaba, luego la subía y en algunas ocasiones lo apagaba completamente para darle emoción al momento, no podía ocultar lo excitado que estaba por todas sus reacciones - ya no aguanto más - dijo apretando mi brazo - entonces creo que es hora de ir a un lugar más privado - apague nuevamente el juguete, ella jalo mi brazo - no lo creo, mejor sígueme - me arrastró a un sendero donde había más árboles - aquí estará bien - decía mientras me jalaba entre los árboles, de repente me puso contra un árbol y me besó, conteste el beso apretandola contra mi, podía sentir sus pechos precionarse con el mio, y mi pene precionar contra su sexo, sentí algo duro y recordé el juguete, lleve mi mano al control y lo encendí, sentí como empezó a vibrar y volvió a brincar, pero está vez soltó un gemido qué se perdió entre los besos, recorría mis manos desde su espalda hasta sus piernas, apretaba sus nalgas, metía mis manos debajo de su falda y sentía su ropa interior, tocaba los relieves del encaje y recorría la orilla desde el costado de su cadera hasta la unión de sus nalgas, cubrían la mitad de sus nalgas, la sujete y quedando ella contra el árbol, seguimos con los besos, mis manos pudieron por fin tocar sus pechos, eran mejores de lo que imaginé, suaves y firmes, el tamaño justo para que mis manos los sujetaran completamente, los apretaba, acariciaba, notaba sus pezones duros, los apreté un poco, ella recorría mis brazos con sus manos apretando de vez en cuando mi chamarra, nos detuvimos un momento para respirar - ya te quiero dentro, no aguanto más - desabrocho mi pantalón, la puse de frente al árbol y levanté su falda, hice a un lado su ropa interior y cayó el juguete, era una mariposa qué aun en el piso no paraba de vibrar, saque mi pene y rápidamente saque el condon, me detuvo - no hace falta, me puse un condon femenino - al escuchar eso no dude un segundo, la penetre, ella soltó un gemido casi como un grito, tape su boca - no puedes hacer ruido, nos van a escuchar - no quite mi mano de su boca mientras la seguía penetrando, con la mano libre la recorría desde la cadera a sus pechos, apretando y acariciando, liberé su boca y saque mi pene, la gire quedando de frente, sujete una de sus piernas y la levante, volví a penetrarla, y a tapar su boca, aprovechaba para besar su cuello y morderlo un poco, quite mi mano de su boca y la besé, duro poco el beso, se acercó a mi oído - qué bien te sientes dentro de mi, incluso con el condon te sientes muy rico - esas palabras me prendieron aun más, la empecé a embestir con más fuerza, podía sentir sus uñas precionando a través de mi chamarra, volvió a acercarse a mi oido - me voy a correr, no pares, por favor no vayas a parar - con voz entre cortada y con la respiración agitada - no me atrevería a negarte un orgasmo y yo también estoy por correrme - seguí con las embestidas hasta que con su pierna me apretó y enterró sus uñas en mi espalda y sentí una pequeña mordida en mi hombro, eso me hizo terminar también precionando mi pelvis contra la suya con un poco más de fuerza y se me escapó un gemido en su oído, volvió a estremecerse y a apretarme, nos quedamos así por un momento, disfrutando la sensación, cuando nos incorporamos nos vimos y sonreimos - eres increíble - le dije con una sonrisa, ella devolvió la sonrisa - tu no te quedas atrás - recordamos la mariposa y metiendo mi mano a la bolsa la apague, la recogió, acomodo su ropa y su cabello, yo abroche nuevamente mi pantalón y acomode mi chamarra, con un movimiento cuidadoso y lento se sacó el condon - espero que no sea la última vez - la miré aún agitado y con una sonrisa le contesté - seguimos en tu casa o en la mía - tomo mi mano y caminamos a la salida del parque para tomar un taxi en dirección de la casa donde seguiríamos
