Escapada
Llevaba toda la semana deseando escapar del día a día, Por fin esas horas interminables se desvanecieron, ya estaba subido en la furgo rumbo a la pedriza.
Mi refugio de meditación y sosiego que tanta energía me aporta.
Llegando al tranco me sorprendió ver tan pocas autocaravanas, repase todo el material necesario para el finde que me esperaba, ya en camino al pasar por la foca me entró una cierta nostalgia por los momentos vividos entre esas cuatro paredes que ya por desgracia no darán cobijo a nadie.
Llegando a canto cochino hice la parada pertinente para saludar a la familia del mesón del montañero que tanto aprecio y tan buenos ratos me han echo pasar. Me fijo en dos chicas que se les nota estar disfrutando del entorno por como sonríen, charlan con caras de total despreocupación por lo que les rodea, me da cierta envidia por qué yo siempre estoy expectante en todo y todos, algo que trato de corregir para disfrutar de mi.
Cargo la mochila a la espalda y cojo camino sin saber bien que ruta seguir y donde parar, cualquier sitio es idílico, sin saber por qué me viene a la imagen el sendero de 4 caminos, y cuando iba a salir me preguntan por la espalda una voz de chica, vas hacer noche?
Al darme la vuelta veo que es una de las chicas que tan agusto se les veía, me sorprendo y casi a trompicones le digo que si que es era mi idea, entonces se hacerca la otra para participar de la conversación.
Donde tienes en mente ir? Le digo que no tenía ninguna idea definida tan solo que si pensaba buscar una zona con paso de agua.
Conoces bien la pedriza me preguntan?
Los senderos marcados todos y algun que otro sitio que no está tan señalizado.
Te importaría si te acompañamos que también queremos hacer noche pero no sabemos bien dónde ir, y el chico del bar nos a recomendado que te preguntemos donde ir que eres de fiar.
A lo cual yo sonrió y le digo que no es todo oro lo que reluce, sonreímos y parece crearse una buena sintonia.
Les pregunto si están acostumbradas a caminatas largas por ir descartando sitios.
Si somos andarinas.
Les hago un pequeño cuestionario para acertar en la elección del sitio, me sorprendo al oír sus respuestas, cuanta coincidencia pienso.
Con lo cual les digo que si 2h de caminata les cuadran, se miran sonríen y me dicen, solo?
Sonrió y les digo que cojan las mochilas que salimos, mientras ellas cogen las mochilas mi cabeza trabaja a toda velocidad para encajar el mejor sitio aunque ya casi desde el principio lo tenía clarísimo.
Nos ponemos en marcha, veo que su ritmo es bastante bueno ya que empiezan los primeros repechos, las conversaciones nos dan confianza y conocimiento de gustos he inquietudes, pasada una hora llegamos a una zona que me gusta parar sacar la bota de vino y hacer un pequeño descanso con los pies metidos en el río, aunque siempre termino metido entero disfrutando del frescor del agua. según les cuento mis planes de parar, les pareció genial y comentando entre ellas que ahora un bañito le estaba apeteciendo cosas mala.
Mi sorprendió gratamente que disfrutasen de agua como yo totalmente desnudos, se nota el buen royo y la química entre los tres, mi mente volaba en todo lo que podria llegar a deparar aquel encuentro.
Tras el descanso proseguimos la marcha con la subida que da paso a cuatro caminos, el ir entre pinos con tanto calor se agradecía sobre manera.
Llegamos al sitio, sus miradas de sorpresa y agradecimiento se palpaban, como el sudor que tenían nuestras camisetas y rostros, les comento que me voy a dar un chapuzón para relajarme y tomar el sol después, ellas hicieron lo mismo bien preparadas con su manta suelo para poner las esterillas, la colocaron sobre el balcón natural que nos ofrecía la estupenda piedra plana al lado de la cascada, yo ya en el agua veo como se besan efusivamente se les nota muy alegres, se vienen al agua y me dan las gracias por enseñarles el sitio tan especial, les iba agradecer el cumplido cuando susana se me acerca y besa en la boca, un simple piquito que no espero pero agradezco sorprendido, laura que ve mi cara de sorpresa sonrie y le dice a susana, tu tan efusiva como siempre, yo les guiño un ojo mientras salgo del agua para tomar el sol, aunque me avergüenza la erección que tengo, salgo con naturalidad, Laura al verme comenta lastima que no nos van los chicos, esa frase hizo su efecto y el aliviado se esfumó. Pero el buen royo seguía en el ambiénte y ellas después de darse su chapuzón disfrutaron del sol y las vistas.
CONTINUARA...