Tu ropa interior esconde desenfreno. Esconde poder akimate…

Tu ropa interior esconde desenfreno. Esconde poder akimate…
“Allí estaba él, intentando mantener una conversación agradable, mientras su mente no paraba de desnudarla. Era como un lento caminar hacia el momento de poder besarla y eso le impacientaba de una manera cada vez más intensa.
Corrían las copas de vino, ese Riesling que siempre trae consigo matices cítricos y que resultan golosos en boca. Pero su mente confundía el azúcar de esa uva del valle del Rin, con el sabor que tendrían sus piernas, desde los tobillos hasta sus muslos esquistos, carnosos, llenos de lujuria…
Entre sus piernas, le esperaba un manjar delicioso, imaginaba como seria poderlo acariciar, mojándose los dedos, la boca, su lengua…Permaneciendo minutos, pudiendo saborear el túnel del tiempo, donde su olor intenso le invitaba a no parar, mientras ella no paraba de gemir..
Su pensamiento se traladaba continuamente a ese momento, mientras no paraba de ver sus labios carmín tan gruesos y su mirada que insinuaba tantas cosas…Y justo en ese instante, en mitad de ruido latineo, con una cava baja repleta, ella tuvo que escucharle su pensamiento mas que ardiente, y decidió prestarle parte de su ropa interior. Así imaginaría, en su mente calenturienta, como seria comerla hasta en el sitio mas escondido de un aparcamiento.
¿Surgirian los besos? Por supuesto. Mojados y llenos de deseo. Ella sabía que tenía el control en ese momento, pues sus manos cuando le acariciaban no hacian mas que estremecerle. Y aún la quedaba el arma de enseñarle sus pechos, sus enormes y preciosos pechos, que el tenía que probar, llevado por el hambre del sexo y la pasión. Ese hambre que nos hace hasta nublarnos la vista y disfrutar como nunca.
¿Volvería verla? Esperemos…aún le debía un masaje con final feliz 😜”
**********Bites Mujer
406 Publicación
El Riesling es mi vino favorito 😋
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