Colaboraión 2....o 3?
Colaboración, 2 o ....3?ELLA
Medita Anna, sobre Roger: Quizás en resumen sea su elegancia y sencillez a la vez. Su humor franco i socarrón a veces, (cuando “es riu pel sota del nas” que decimos), también absurdo?, surrealista?, (ya está!, sus raices empurdanesas! I la pequña masia de la familia; desde que nació, nunca ha dejado de ir), loquesea: La hace reir, incluso durante el sexo, no calla el cotorra!.
Como profesional: impecable, perfeccionista y resolutivo, rápido muy rápido, no lo ves venir i zas, ya te tiene donde quiere y a la vez te reconoce, incorpora matices tuyos al asunto que sea, te pregunta,.. y ya està, win win, ni para ti ni para mi , de los dos! Con los demás, su equipo, por ejemplo: comprensivo y exigente también, pero presto a ayudar siempre, capacitador dice el. Pero afiliativo, también, lo veneran, casi, en su equipo,( por lo poco que ha visto en estos dos meses ya de colaboración esporádica, 1 vez cada semana, o quince días, videoconferencias aparte).
Todo esto lo notó cuando vio como se relacionaba con sus compañeros, (de la empresa de Anna, que ya le conocían); había aprecio y colaboración sincera, raro en el mundo del márqueting, y más cuando se juntaban los de marqueting y los de packaging.
Y durante estos 2 meses escasos de sexo, nada, en el trabajo nada! Puro hielo, cortés, peró hielo. Ella una más, ningún privilegio, exigente y duro igual, con ella, con paciencia le enseña, (capacitador, mucho en el trabajo y.... en la cama, piensa), y la corrige si es necesario también, suave pero la reconduce. Pero ni se insinúa ni nada. A ella le cuesta, pero ya se va acostumbrando. Pero cada 4 o 5 semanas, uff, es demasiado.
Cuando Xavi su jefe le pasó el asunto de la colaboración pensó: otro muerto que se quita de encima. Pero bien para eso estaba, y de todas las operaciones se aprende.
Cuando lo vio al asomarse al inicio de la escalera, el día concertado para la reunión de cierre y, le vio abajo, elegante pero actual, esa sensación que dan algunas personas de que la ropa se adapta naturalmente a su cuerpo, como si no hubiese otra opción,.. Cuarenta y tantos, 1,80mt, “no creo que llegue”. Pelo castaño, un poco canoso, (el punto justo, de la elegancia, otra vez), barba corta canosa, diría, (“ummm rascando en mi entrepierna.. cállate loca! ” fugazmente pensó mientras empezaba a bajar las escaleras). Espaldas anchas y brazos fuertes, (¿musculados?, a través de la chaqueta de ante lo parecían, o se insinuaban, el punto justo otra vez), maletín de piel, no muy grande, elegante, (si, otra vez), y las gafas de sol en la mano. Desde arriba también parecía tener buenas piernas, enfundadas en pantalones grises, de cintura alta con el polo azul metido por dentro. “Pues le deben marcar buen culo, veremos”, pensó mientras bajaba lentamente sonriéndole.
Desde arriba se había medio excusado por el retraso, después de saludarle. Le encanto cuando se giró, (vete a saber en qué estaría pensando y, el saludo le sorprendió, medio asustó, diría), y su rostro mostro sorpresa, primero, agrado y azoramiento después, mientras le sonreía, con cara un poco de atontado, “ah, hola,… tranquila, no….no… pasa nada”.
Rápidamente calibro que ella también le había gustado y sorprendido a él. Y eso significó asumir que él le gustaba a ella, (se ruborizo un poco, notó). Esperaba encontrar un sénior aburrido, barrigón, sabelotodo del oficio, condescendiente con una mujer más joven, etc.
“Qué maricón el Xavi!!”, ahora entiendo aquel: “te gustará, te encantará trabajar con él “, y su sonrisa maliciosa, “y aprende de él, en serio te lo digo, cualquier acción , frase o comentario suyo,… 5 jugadas por delante va, mínimo, de verdad te lo digo, esponja te quiero”. “si, hahaha, su coño una esponja, (dos meses i poco, han pasado), primero moja y después su leche absorbe, hahaha”, “calla loca del coño, calla, hahaha, piensa. Bromas aparte, con Roger, en la colaboración, un master impagable estaba haciendo, profesionalmente,.. y de lo otro también, hahaha, calla loca, piensa, donde estabas donde Anna,… a si cuando bajaba las escaleras… I aun no le conocía….
(Pelo, barba corta, elegancia, espaldas, brazos, piernas, buen culo,…el ensimismado rozando la idiotez en su cara ) Pensaba todo esto a gran velocidad, mientras bajaba las escaleras sin dejar de sonreírle, mientras él desde abajo giraba cabeza y cuerpo para seguirla en su descenso, ligeramente embobado, se podría decir. “Bien parece que hay partido, hehehe, vamos a jugar Roger, a ver cuanto aguantas” pensó.
A la vez, ella intentaba ignorar los signos de alarma que le mandaba su chochosentidoarágnido. Humedecía, su coño humedecía ligera pero descarara y, felizmente, diría ella, (cerdo, mentalmente le dijo entonces a su coño, eres un cerdo).Se lo negaba y se lo negó durante días y semanas, “ese cuarentón, (atractiiiiivo, vale), y yo?, que va! “.
Hasta el día del email, agradecimiento y contra-agradecimiento con ese “placer” y ese “satisfacción”, por allí puestos. Al leer, releer y entender, o parecerle entender entre líneas,.. Y si, el chochosentido en estado de alarma absoluta, humedad ya no relativa, absoluta casi. Tuvo que desahogarse en el baño!, con la mano tuvo que taparse la boca, para no emitir gemidos). Después respirar hondo, “céntrate coño!”, nunca mejor dicho”,..I al salir del baño, hora de comer ,.. nadie por aquí, nadie por allá, y en un arrebato, le invitó a la vermuteria,.. y en minutos la respuesta de él: HECHO. el jueves 14,30,... el resto ya es historia, de su placer y del de él, hermoso por sorpresivo e inesperado. El ligero vermut y la tarde de placer casi eterna,... en aquel hotel ,.. para su historia, en mayúsculas, y para la de él también, lo sabe.
Y finalmente expectante, ya abajo, aquel primer día, después del último escalón, el ya plantado ante ella, “me dará dos besos, o?”.. la mano, le da la mano, de forma profesional y sonríe amplia y confiadamente. “Bien jugado Roger, veamos si eres tan interesante como pareces, o poco más que fachada, juguemos!”, pensó esa mañana.
Y si, interesante en exceso, con interés sincero por ella, por su trabajo, por su adaptación en esta empresa, alguna broma. Y quirúrgico, y certero en su trabajo, en realidad como ella. (Lo mismo vio Roger ese día en ella, inteligencia, cultura, profesionalidad, humildad, bondad,.. y si, que estaba realmente buena y vestía y se movía realzando aún más sus atributos, elegantemente felina, pensó aquel día, Roger, de inmediato quizás)
Y ahora, dos meses escasos después de aquella tarde, de aquel hotel, cerrando ordenador y agenda, revisando tareas pendientes y delegadas. Dos meses escasos y dos encuentros más por entremedio, a por el cuarto round. Especial, quizás porqué el verano empieza a apretar, y apetece. Cuando se lo propuso, un simple “lo cuadro!” fue certeza de que ese hotelillo, con piscina, restaurante, spa, gimnasio.., y esa suite, en medio de las viñas en el Penedés, era un acierto.
Esta tarde y todo mañana, en medio de la semana, solo para nosotros dos, piensa, ya saliendo del despacho. La última, tampoco hace falta que nadie la vea subir en el coche de él, aunque ha aparcado un poco lejos de su empresa, según ve en la geo que le ha mandado por wapps,.. Y otra vez, su coño humedece, versión goteo, solo de recibir el waps con su posición. Ya no es chochosentido, no, es pura certeza del placer que recibirá y dará. “Suerte que me he puesto falda, pero como no me dé prisa, empapo bragas,¿ por qué mo me he puesto un salva?, y ahora no tengo tiempo,... mierda”.
Al girar la esquina ve el coche de Roger, aparcado a unos 200 metros en la calle algo desierta, la gente de las empresas ya se han ido a comer, piensa. Le hace luces. “Como si no lo hubiese visto nada más girar, que tonto!” y se sonríe para sí. Y si, otra vez la elegancia. Su coche, con quizás 15 años, un suv de esos, gris metalizado, marca alemana, cuadrarete, grande, conservado en perfecto estado, como su dueño, piensa y se sonríe. De línea atemporal y potente, por lo poco que entiende y le ha parecido las pocas veces que se ha subido en él. Y sus relojes, y el móvil, también siguiendo su estilo, no excesivamente caro, buenas prestaciones y bonito. Y como su gusto por escribir con estilográfica, “me concentro más y me gusta el rasgar de la plumilla en el papel”… Y sus gustos, lee, cine, teatro, arte, fotografía, montañismo, tenis, viajar… todo le llena y le hace feliz, parece. Y la música que le gusta, su lista de spoty, más ecléctica no puede ser: blues, jazz, electrónica, clásicos del pop y actuales, (que él descubre vete a saber cómo), tecno, pop català,.. cuando está en aleatorio, aquello es una locura.
Y con todos esos pensamientos, ya a la altura del coche, él ha salido, con una mano le abre la puerta. Con el otro brazo la recibe, la envuelve por la cintura y le besa en la camisura de los labios, suave y largo a la vez, ¿con puntita de lengua, o solo me lo parece?, piensa. A estas alturas, tonterías las justas, se dice, deja la ligera maleta en el suelo y agarrándole la cara con ambas manos, amarra sus labios en los suyos, beso intenso, se los muerde, el también, antes de dar rienda suelta a sus lenguas, unos instantes nada más, o más, no sabe. Suerte que no hay nadie por la calle, piensa, mientras él la empuja por la parte baja de su espalda, por donde empieza el culo, hacia sí, hacia su pelvis. Quiere que note su polla muy dura, comprimida en los tejanos, y la nota, alargada subiendo en diagonal, buscando por donde respirar, la pobre, en apuros, como su coño, ahora ya en estado de humedad absoluta.
Dentro del coche, respirando hondo, sonriendo, besándose suave, bocas, cuellos, sus manos revolviéndole el pelo acariciándole la nuca, atrayéndola él, ahora ella una y otra vez, para besarse, su lengua, mi lengua, sus labios, los mios,...
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Vámonos, o no salimos de aquí dice él, asiente ella sonriendo, acomodándose. Salen del centro de negocios de Sant Q. “Que cabrón, conduce elegante también”, deslizándose entre carriles en la autovía, con la potencia justa para no molestar a otros conductores, suave y preciso, jugando con las levas del volante para cambiar las marchas y obtener siempre la potencia justa. “Me gusta como ronronea el motor y como ruge cuando le pisa” piensa, distraída en el paisaje con las primeras viñas, ya en la carretera de l’Ordal. Abandonada de si misma, en un estado lánguido, “una cápsula espacial este coche ahora es, ellos solos, por el espacio, destino planeta placer, uuf, piensa, Anna)
........................continuara???...................ya direis, queridas/os, si interesa, que igual no, y es una de las putas pajas mentales, (y si, de las otras tambièn), que me monto,,..que ir por na es tonteria!.....