La vida mancha

Venture retó a Jota a diseñar un relato doble en torno a la idea de que "la vida mancha" y aquí está el resultado.

En clave de juego, dejamos que cada uno image a quién corresponde cada versión (estaremos encantados de escucharos).

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La vida mancha

La vida mancha, dicen.

Olvidan decir cuánto engancha, generosa y sin revancha.

Sobre todo cuando brota entre tus muslos, lenta y deslizante, o sutilmente rezumante, o apasionadamente chorreante.

Esa vida que me busca y me encuentra, que nos atrapa y se desborda, quemando, ardiendo, sintiendo, regalando.

La vida mancha y engancha.
Tu Vida nos mancha, sí...
Nos encanta...
Y, si no lo entienden, ya lo entenderán.

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La Vida mancha (Bendita tú eres)

Conocí a una pareja de amantes peculiares que en lugar de quedar para hacerse el amor se daban cita para hacerse la guerra.

Ella no estaba hecha para pasar desapercibida y él tenía una risa contagiosa capaz de iluminar una ciudad.

Tras un buen número de polvos sin promesas vacías que ambos sabían que no serían capaces de cumplir, suscribieron sin palabras el compromiso de probar un juego de rol.

Ella se reiría más y él se atrevería a mostrarse.
Auténticos, valientes...

Más limpios con cada sábana de hotel mancillada y cada braga arruinada a deshoras.

Más sucios con cada intimidad compartida y cada hito superado.

Enredados con mirada limpia en una vida divertida y con sabor.

Como cuando ella le abrazaba con las piernas para que no dejara de clavarse y él solo renunciaba al sabor de su sexo para coger aire

Porque su Vida tenía sabor, y ese sabor daba Vida.

Y la Vida mancha, joder.

Y benditas manchas...
...y bendita Vida.