Encuentro erótico entre desconocidos

Ya había subido este relato a mi muro, pero me comentaron de este grupo de relatos eróticos así que me decidí a subirlo aquí. Hace un par de años en un autobús de regreso a la ciudad de México me tope con una chica que también venía sóla, además de que el camión estaba prácticamente vacío excepto por unos pasajeros en la parte de adelante. Nosotros estábamos en lados opuestos del autobús y una fila adelante, pero nos podíamos ver sin problemas. Durante el viaje de unas 4-5 horas nos volteabamos a ver de repente, hasta que en un momento ambos sonreímos, ella con un guiño y movió la bolsa que ocupaba el asiento junto de ella, así que con muchos nervios me acerqué, esperando no malinterpretar la situación. La salude y empezamos a platicar, después de un rato de empezar a vernos de cierta manera, ella volteo a ver al resto de pasajeros. -Parece que todos vienen bien dormidos- me dijo y comenzó a desabotonar los dos primeros botones de su blusa, descubriendo sus preciosos senos cubiertos por su brassier. Se excusó diciendo que tenía mucho calor y nadie la iba a ver aparté de mí. Después de eso no pude evitar tener una erección y con el pans que llevaba para ir cómodo se me hizo toda una tienda de campaña difícil de ocultar, ella lo noto de inmediato y me sonrió -Parece que también te gusto por lo que veo- y paso siguiente tomo mi verga con su mano por encima del pans y empezó a manosearme lentamente, yo casi suelto un gemido y me puse a mil, así que no desaproveche el momento y saque una de sus tetas del brassiere y de inmediato lo atrapé con mi boca, lamiendolo y viendo su expresión de placer. Después de estar así unos minutos, una eternidad con esa calentura. Después me dispuse a meter mi mano en su pantalón a lo que ella respondió quitando mi mano. Me dijo que no estaba depilada y le daba pena, así que lo deje un momento, en eso recordé que llevaba conmigo unas mandarinas y rápidamente le dije que me esperara en lo que iba por algo a mi lugar, al regresar ella se saco de onda un momento, hasta que me vió con con parte de la mandarina simule masturbarla, los ruidos que se producian con mis dedos y el jugo imitaban a la perfección el sonido alguien masturbandose y después de verme hacerle un cunnilingus a la fruta no puedo con su calentura, desabotonando y bajando el cierre de su pantalón para mí. Pronto mi mano se colo dentro y mientras ella metía su mano dentro de mi boxer. En unos momentos ambos estábamos rojos, con sudor en la frente y el cuello, viendo uno al otro mientras nos llevábamos al orgasmo mutuo. Ella llego primero mordiéndose los labios y enterrando sus uñas en mi brazo mientras cruzaba sus piernas abre mi antebrazo y después de unos minutos de que ella continuara masturbandome le pregunté si tenía papel para no manchar mis pans con mi semen y acto seguido saco libero mi verga toda roja y dura de mi boxer metiéndola completa en su boca, con tal sorpresa no aguante y en unos segundos estaba dándole toda mi leche en su boca, después me mostró el semen en su boca antes de tragarlo todo, yo estaba extasiado y con ganas de gemir a todo pulmón. Fue de los momentos más excitantes en mi vida.