Juego con imagen (2da 2023) LUNA

Ya no hay fruta prohibida,
Solamente la que te regalamos,
Boca avariciosa y ansiosa,
Deseando saborear el néctar que se te ofrece, que se te brinda, ofrendas de placeres hasta saciarte y agotarte...

Esa misma cereza roja afrutada,
Quizás también ese beso tierno, pasional
Entremezclada de sabores y orgasmos
Tu lengua preparada al siguiente asalto,
En cada rincones de tu piel anhelas esas próximas embestidas,

Quizás un miembro o dos o tres sabores a plátano,
Esperas lamer, mordisquear escupir y devorar sin retención ni redención, antes de sentirlos a cada uno de ellos en tu interior,

Hambre de ti , de el, de ella,de ellos, de ellas Compartir nuestro último suspiro,
Juntos y saciados, hasta dormirnos hasta la mañana siguiente,

Quizás tumbados en una cama, o bien en el suelo mojado, o bien en mitad de ese campo de cerezos, estamos todos saciados descansando ahora...

Hasta la mañana siguiente, el primero despierta a los demás y empezar un nuevo desayuno de lujurias, desenfrenos, y cerezas.

No veo cerezas, aquí veo los chupachuses de @****in4 🙈🙈

Cómo me gustan tus juegos, sobre todo cuando decides vendarme los ojos y llenar mi boca y mis labios de múltiples y diferentes sensaciones.
Tan pronto me estás besando tú o vaya usted a saber quien, que me están acariciando la comisura de los labios o dejando caer sobre mi lengua gotitas de líquidos de lo más dispar. ¿Es saliva, tan sólo agua, un poquito vino, fruta fresca?
Da igual, cada cosa despierta en mi un nuevo anhelo y crece mi excitación, pues lo mismo acercas a mi boca un par de cerezas deliciosas que tus pezones aún más deliciosos, introduces tu lengua y jugueteas con la mía, que acercas tu sexo y me permites lamerlo y así juego tras juego nos vamos excitando cada vez más hasta alcanzar ese nivel que nos tiene totalmente enganchados al placer.
¡Juega, juega siempre conmigo y no dejes de hacerlo corazón!

La excitación del fruto prohibido que reconoces incluso cuando la penumbra llena tus ojos, reconoces los manjares de la excitación, los fluidos que te sacian la sed de tu pasión, los mismos que te llevan a un orgasmo en el que explotan todos los sentidos.

Mi boca, ávida de deseo, piensa en tenerte entre mis labios.Los humedezco con mi lengua mientras mis otros labios se humedecen con sólo pensarte. Cuanto desearía saborearte cual fruta prohibida, degustarte lentamente hasta sentirte explotar y paladear tu dulce néctar....pero aún no llegas, mientras tanto me conformaré con el dulzor de estas cerezas de importación

Me levante aquella mañana para ir a trabajar. Habías tenido que marcharte a trabajar, después de una noche de lujuria y desenfreno inolvidable. Nos habíamos decidido a jugar con frutas rojas. Te hice acostarte sobre la amplia mesa del salón, desnuda depiladas abierta de piernas y fui con cuidado colocando sobre tus pechos cerezas, cada una colgaba de un pezon. Sobre tu sexo coloque fresas y sobre tu vientre ,abundante nata y trozos de manzana roja
Cuando todo estuvo listo me dispuse a comenzar mi banquete
Comencé por tu sexo y disfrute la fresa,acaricié tus senos y me comí las cerezas con fruición, y acabe en tu boca besandola con pasión y fundiendo mi lengua con la tuya en un solo ser .Tuviste un órgasmo de tanto placer y mi cuerpo tembló ansioso y me corrí sobre ti fundiendonos en un abrazo

Tantos años viendo las cerezas de Pachá !!! tantos bailes, tanto sexo en los baños, en los reservados, tantas noches, tantas rayas, tanto de todo y nunca nadie me había ofrecido dos cerezas colgadas de un pezón como un trofeo casi inalcanzable .

Porque aquí me tienes sentado, atado y bastante perjudicado porloqueseaquehasechadoenelcoctel, que ahora me hace ver colores que vuelan y se mezclan y una sola figura: tu pecho coronado de dos cerezas rojas , rojisimas que me excitan más que todo tu cuerpo desnudo, erguido frente a mí, desafiante y difuso.

Mi pantalón roto ( proque está roto???) deja ver una erección tan grande que no parece mía.. ( que me has echado?? ) que cuando acercas las cerezas a mi boca , algo termina de romperse a la altura de mi entrepierna y estalla un botón que sale disparado. Veo tu sonrisa entre un fondo de colores que sobresalen de tu pelo y decides cambiar tu destino... metes una cereza en tu boca y la haces rodar sobre mi glande inflamado.

El gemido que suelto es azulverdoso y se enreda en una batalla de colores con tu cintura morada, pierdo el mundo de vista mientras masticas dentro de tu boca la cereza y mi polla que late desesperada por correrse…

Un mundo o un microsegundo después, no lo sé, te relames entre restos rojos y blancos, me plantas un sonoro beso en los labios y me dices: La otra, te la guardo para el postre…

Y te vas, dejando una estela multicolor que parpadea brillante y desaparece.

Había sido solo un segundo. Saliste desnudo y te tapaste con una toalla. Pero vi tu polla y tus huevos colgar. Cogi unas cerezas y las chupe con deseo mirándote. Me miraste y nos deseamos. Ya encontraremos la ocasion.

Celosa. No de cuerpos, de letras, de sentires. Me niegas tus lamidas, tus mamadas…

“ Me vestí de hielo, aunque por dentro era fuego…” y me consignas ese par de cerezas. Sí, ya sé, no son mis bolas. Serán las del siguiente lobo. No soportas ser otra más. En el país de las palabras ansías ser única, sola, sin rival. Pero cariño, soy un hombre. Mis aperos no son los tuyos. Varón ordinario, las alabanzas en bellas voces labran en el surco de tu sexo, de otras vulvas. Tu me lees, cual Dulcinea, pero yo, caballero en triste figura, no soy Quijote. Anhelo carne de hembra. Y con adarga emboscada en versos me lanzo a a los caminos de esta lúbrica comunidad en busca de Marcelas, Doroteas, Luscindas y, a vueltas, ¿ por qué no ? Maritornes.

Mas tú no transiges y me lanzas anatema: “ mi distancia, mis frías palabras las notarás, no más escudos esta vez es real. “, mientras tu lengua chupetea ese par de frutos rojos, ya tan lejos de mi.
Y yo no desfallezco, la punta rosa de tu lengua, los labios en fuego, convierten mi falo en equino de cuarenta y ponen a cabalgar mis letras como un Rocinante joven.

Y tú entras a matar: “ Despertaste a mi Luna de lobo “.
Entonces vuelve a mi lo de Alonso Quijano, aún no loco entreverado, y por fin alcanzo la América en los versos del trovador.
“ En el claro de la Luna
Donde quiero ir a jugar
Duerme la reina fortuna
Que tendrá que madrugar “



“ Mas si yo pudiera serle
Miel de abeja en vez de sal
A que tentarle la suerte
Que valiera su soñar “

Todo por tu cuerpo. Hombre común soy.

jajajajajajaja... casi me atraganto de la risa.

Me hizo pasar al dormitorio y ponerme cómoda mientras me tapaba los ojos. Sabía perfectamente que no dejaba que nadie lo hiciera pero ella era mi excepción a todo.
Salió corriendo de la habitación, oía sus pies descalzos y solo de saber que había un nuevo juego en marcha, yo ya empezaba a ponerme cachonda.
Dejó algo sobre el edredón, por el sonido, diría que una bandeja.
Besaste mi cuello mientras esperaba algo con la boca entreabierta y me eché a reír mientras suspiraba de placer.
Entonces sí chocó algo contra mi boca y abrí los labios para saber qué era. Buena forma, durita y dulce. Era un par de cerezas 🍒 lo que prometían un buen comienzo de noche, sobre todo porque ya estabas comiéndolas de mi boca mientras mis manos subían suavemente hacia tus pechos para notar esos pezones que tan cachonda me ponían