Al compás de las olas...

Tu recuerdo es como las playas del caribe, agua cristalina donde mi reflejo es tu rostro, van y vienen olas, como los destellos en mi memoria de aquellas noches locas que atado a tu cintura me perdía en tu lujuria.
Tu recuerdo es un martirio, que no me deja vivir conmigo mismo, es que no encuentro regocijo en nuevas camas, en nuevos amoríos, tu te llevaste mi delirio, como el mar aleja a los navíos.
Tu recuerdo es mi testigo, caen noches y nacen días, pero yo sigo aquí en mi agonía, como el naufrago que mira a la lejanía, esperando el milagro de volver a tenerte amada mía
Tu recuerdo es mi condena, porque no puedo aliviar mis penas, entro y salgo de entre muchas piernas, pero no logro quitarme tu aroma, solo deseo volver a disfrutar del buen sexo, aunque te sigo deseando en la profundidad oscura de mis memorias.