¿POLÍTICAMENTE INCORRECTO?
Aviso (parte de este relato puede herir sensibilidades, recuerda que es una fantasía y las fantasías... Son libres. Recomiendo leer hasta el final... 😉)Risto había estado leyendo unos viejos correos electrónicos, hacia tiempo que no abría la carpeta donde los tenía guardados, pero aquel día, trasteando, el puntero del ratón se había detenido sobre ella, y esta casi pareció abrirse sola.
Risto sonrió y al azar echo un vistazo, el correo elegido resulto ser uno de los mas tórridos que recordaba. Las primeras frases, soltadas a bocajarro le cogieron desprevenido, instintivamente se llevo la mano a los huevos por encima de la ropa para emparejarlos, la sacudida mental había conseguido crear en ellos ligeras tiranteces. Volvió a sonreir y siguió leyendo, cuando se dio cuenta devoraba ávido el escrito, resopló cogiendo aliento, no le hacia falta tocarse entre las piernas para saber porque se tensaba terriblemente la tela de su pantalón, aun así el instinto funcionando por su cuenta hizo que su mano ahuecara la goma de la cintura para colase dentro. Se palpo, la dureza y el tamaño del asunto le parecieron considerables, pero no era
de extrañar, leyó las ultimas palabras acariciandose y acto seguido echo la cabeza para atrás resoplando. "madre mia… " pensó, las palabras escritas se transformaban en imágenes totalmente definidas en
su mente…
El correo se trataba de un pequeño relato de sexo anal terriblemente excitante y morboso, siguió acariciando su polla mientras recreaba las imágenes del relato en su mente, la notó endurecerse aún mas en su mano. Resopló y se la soltó, la cabeza le zumbaba.
Decidió dar una vuelta por la casa para intentar distraerse, pero en vano, las imágenes instaladas en su mente no le abandonaban y tampoco la erección que empezaba a ser ligeramente dolorosa. Se sentó en el sofá y miro el reloj, apenas faltaba un cuarto de hora para que, su compañera llegara a casa, así que se recostó en el sofá y se dispuso a esperar.
Ahora que lo pensaba, ya hacia cierto tiempo que no practicaban sexo anal, no por nada especial, sino simplemente porque sus juegos sexuales últimamente habían ido por otros derroteros dejando aquella practica poco a poco de lado. En aquel momento no comprendía porqué, solo con pensar en meterla en aquel agujerito pequeño y apretado le ponía la polla a reventar, ademas, tenia tan buen culo la jodida… recordó lo mucho que disfrutaba follandosela por
detrás, hundiendose hasta el fondo mientras le abría las nalgas con ambas manos, para empujar hasta no dejar fuera ni un milimetro… las ganas de romperle el culo a pollazos a su pareja, le hicieron levantarse del sofá de un brinco cuando sonaron las llaves en la
cerradura, llevaba mas de diez minutos pensando en ello y el empalme de caballo que tenía comenzaba a dolerle en serio.
Apenas cerro la puerta y se volvió para colgar las llaves, se encontró con que los brazos de su compañero la rodeaban y sus manos le recorrían ansiosamente el cuerpo. Eva se río, aquella bienvenida no era inusual pero después de comerle los morros y morderla hasta casi hacerla daño, se dio cuenta de que su compañero estaba mas excitado de lo usual.
• Pero Ris… te pasa algo? Dejame que deje estas cosas que traigo y que me de una ducha… que hoy he sudado a mares, vengo hecha una guarra. - Risto se quedo mirandola y asomo a su rostro una sonrisa lobuna.
• ¿Y como de guarra vienes? - le susurro al oido - Porque todo lo guarra que vengas hoy … creeme que va a ser poco… - Risto bajo la vista recorriendo su cuerpo con la mirada, le sacó a tirones la camiseta y le desabrochó los botones del pantalon, Eva se reia - Si… ríete preciosa…- le susurro Risto al oido - Ríete ahora, porque en cuanto te quite los pantalones te voy a romper el culo… - La muchacha lo miro con ojos como platos.
- Pero cariño… que te pasa? Si quieres ya sabes que no tienes mas que pedirlo… pero hace tiempo que no… - No la dejo terminar de hablar, tironeo con violencia de sus pantalones bajandoselos a las rodillas, la hizo caer.
• Serás bruto? Espera!- Pero Risto no podía esperar, las ansias le nublaban la mente. Tiro unas cuantas veces mas y se deshizo de los pantalones, la
agarro de un brazo y la puso de pie, empujandola de boca contra la pared.
• Pero Ris por dios… dejame que… dame tiempo a… - La visión de aquel trasero, redondo, precioso… su polla mandaba en él en aquellos momentos, casi ni oía lo que Eva estaba diciendo, solo quería abrirse paso.. Meterse dentro… follarse su prieto agujero… Se puso de rodillas y así como estaba, la agarro por las caderas y obligandola a volcarlas hacia atrás metió su cara entre los suaves cachetes. Aspiró su aroma... aquel olor que le volvía loco, y se puso a comerle el culo como un hambriento, buscando con su lengua el precioso agujerito que allí se ocultaba, le metió la lengua y noto como se cerraba un poco molesto por la violencia, aquello le volvió mas loco todavía, pensó en él, cerrandose en torno a su polla, apretandole, y redoblo los lametones y lengüetazos con ahinco.
- Pero Ris… cariño… - Eva parecía quejarse con menos fuerzas, volvió a meterle la lengua, aquella vez su ano no se resistió tanto… Él sabia que todavía no era suficiente, pero notaba su polla palpitando de tal manera, que dilatarla en condiciones no le importó demasiado, se puso en pie jadeando y la apretó con todo su cuerpo contra la pared. Restregandole la polla ansioso por el trasero, le susurró al oido - Tienes un culo precioso amor… hace mucho que no te lo follo…- Eva no se resistía, pero estaba nerviosa.
• Ris… cariño… estas cosas no se pueden hacer tan rápido …hace mucho que no lo hacemos… me vas a hacer daño... - Risto se rió en su oído totalmente ebrio de deseo, había dicho la palabra mágica, "daño". El relatito que había leído era una fantasía algo violenta, y esa palabra
misteriosamente en vez de disuadirlo, lo excitó mas… se escupió generosamente en los dedos y le metió la mano entre las nalgas penetrandola con un dedo, Eva se retorcio incomoda, - Cariño… - Susurró Risto en su oido - Sabes que es lo próximo que vas a tener aquí dentro?- movió el dedo que tenia en su ano de forma circular - Una polla enorme y caliente…
• Ris por favor… ten cuidado ve más despacio.
• No te preocupes cariño, veras como solo te molesta un poco… - La agarro con fuerza obligandola a arquear la espada y sosteniendose la polla con una mano la llevó directa a la búsqueda del precioso y apretado agujerito
• Ris… no, dejame! Así no…- Risto hizo caso omiso, sentía su polla enorme, palpitando con fueza, buscando a ciegas donde meterse, noto la humedad y la pequeña y redondeada hendidura y empujo… su mano
Seguía guiando su polla para que no resbalara y se torciera mientras seguía empujando, abriendose paso a las bravas. Eva lanzo un grito
• Para! Para! Es mucho!- pero ya era tarde, Tenia todo el capullo dentro y la enorme cantidad de saliva que Risto le había metido en el culo estaba haciendo bien su trabajo… sentía su polla resbalar lenta pero constantemente, dejo de ejercer presión, tenia la mitad dentro, y su compañera, gemía y suplicaba que se la sacase, aquello todavía le excitaba mas… se notaba que no estaba totalmente dilatada… que hacia tiempo que aquel culo no había sido convenientemente abierto y follado, porque la presión era deliciosamente fuerte.. El placer lo estaba matando…
• Tranquila cariño… tranquila, si me voy a correr enseguida - y lejos de obedecer los deseos de su pareja y sacar la polla de su culo siguió empujando hasta llegar al fondo. Risto soltó un
tremendo gemido de placer, hundió los dedos de ambas manos en las redondas caderas obligando a Eva a que se arqueara todavía un poco mas, a que sus nalgas se abrieran aún mas, la muchacha giro la cabeza y lo miro, estaba temblando, la penetración había sido muy intensa y el dolor se mezclaba con las otras sensaciones en su rostro.
• Ris por favor... - Le suplico - me molesta… esta… muy grande - No lo pudo evitar, noto su polla palpitar y crecer todavía un poco mas… Eva gimió quejandose. La agarró del pelo forzandola a que echara su cabeza hacia atrás, y comenzó a susurrarla al oído mientras empezaba a moverse - Cariño mio… mi amor…- le decía mientras le sacaba y metía la polla del culo lentamente. Eva tenia tal gesto en la cara que era imposible decir si iba a gemir de placer o echar a llorar - veras como enseguida se te pasa… y antes de que te des cuenta… te estaré haciendo jadear como una zorra.- Le clavo la polla con todas sus ganas.
Eva chilló y se quedo con la boca abierta gimiendo impotente - la mente de Risto se nublo, por un momento había sentido el ano intentar cerrarse, rechazarlo… pero estaba tan bien lubricado, y estaba hundido en ella de forma tan profunda que aquello era imposible, comenzó a penetrarla con avidez, concentrado en sacarla al máximo sin salirse, Eva se retorcía, casi lloriqueando, pero era tan fabuloso follarse ese culo que no podía parar.
• Lo siento cariño, lo siento… es que tienes un culo tan bueno…- se excitó mas con aquel pensamiento - me gusta tanto follarmelo… que tengo que meterte la polla aunque no quieras… aunque te lo rompa… has visto como me tienes? Como me pone follarme tu culo? - Empujo nuevamente con todas sus fuerzas, esta vez, Eva ya casi no grito, llevaba un buen rato castigando su agujerito sin parar y al parecer había sido el suficiente como para que terminara jadeando con la mejilla contra la pared y los ojos cerrados. Risto llevo una mano por delante hacia su coño, estaba empapada, se rió… Abrió bien ambas nalgas con las manos y saco la polla despacio, tenia el ano enrojecido y completamente abierto, lo vio cerrarse poco a poco…
• No.. No… - Eva volvía a quejarse - Mas… dame mas cariño… no te pares ahora… - giro la cabeza y lo miró. Directamente a los ojos, con aquella sonrisa suya mezcla de inocente picardía, puro morbo y una pizca de desafío. Se notaba que estaba más que satisfecha. Risto había cumplido punto por punto cada una de las indicaciones que le había dejado escritas en aquel correo. Uno de los muchos que Eva le había mandado cuando todavía se estaban conociendo y que atesoraban cada una de las fantasías que deseaba cumplir.
Aquella sonrisa... Si le volvía loco.
Risto resopló, arrastró con una mano todos los flujos de su coño hasta su culo, volviendolo a mojar bien por fuera y dentro con los dedos… Eva se retorcía de placer, algún movimiento demasiado brusco todavía parecía molestarla, pero jadeaba mas que gemir quejosa. Risto fijo su vista en aquel culo bien brillante y lubricado y su polla palpito… Eva se le abría, se le ofrecía sin reparos , pidiéndole, suplicandole, que se la metiera y que la follase hasta romperselo o llenarselo de leche.
Risto obediente, agarro su polla, coloco bien la punta y empujo sin miramientos hasta el fondo haciendo que su compañera se enderezarse por un momento... Y como un puñetero loco poseído volvió a follarle aquel precioso agujerito suyo, notando como palpitaba su miembro a cada envestida, deseando meterse cada vez mas hondo en aquella mujer que le volvía loco, esforzándose en hacerla gritar, retorcerse, suplicar y gemir hasta notar como un orgasmo tremendo la arrasaba, provocando que su cuerpo temblara y su ano se contrayera apretandole la polla de forma absolutamente enloquecedora. Su vista se nublo... Y todo su cuerpo a su vez sintió la descarga del orgasmo convertido en una brutal y prolongada eyaculación que entre roncos gemidos dejó el culo de su compañera caliente... Palpitante... Abierto... Y rebosante de su esperma...
• Espera... - dijo ella - No te salgas todavía... Quiero sentir contigo como te escurres por mis piernas...