Esa sonrisa

Fui al club como tantas otras veces, sin expectativas más allá de disfrutar de la buena música y un par de copas. Ese día iba con un amigo con curiosidad por el mundo liberal, así que pedimos algo y nos fuimos metiendo en la pista.
¿Sabéis cuándo notáis una mirada intensa en vosotros? Me di la vuelta mientras sorbía con mi cañita y vi a una pareja. La chica bailaba con él, él me miraba y sonreía. Su mirada era penetrante. Iba sin camiseta y no podía estar sin dejar de mirarlo mientras él no apartaba sus ojos de los míos.
Intenté acercarme entre el tumulto pero su chica no estaba por la labor de compartir, al menos ese día. Rocé queriendo sus músculos y noté cómo su mano agarraba una de mis nalgas por debajo de mi falda pero sin disimulo.
Me habría gustado besar esa sonrisa, lamer su torso y que pasara lo que tuviera que pasar.
Fui a la barra y vino detrás. Pegando su erección a mi trasero pidió al camarero y yo me sentí como una adolescente sin saber qué hacer. Me di la vuelta con más actitud que seguridad. Nuestros ojos se miraron, me cogió despacio de la cintura y me besó con furia y ganas. Yo solo pensaba en que no terminara y no se acercara su pareja .
Sus manos entraban debajo de mi minifalda y empezó a masturbarme allí mismo. Mis ojos se cerraron, mi espalda se arqueó hacia él y se acercó a morder mi cuello. Estaba empapada, sacó de mí sus dedos y sin dejar de mirarme los metió en su boca. Pasó un brazo por encima de mi hombro y cogió su bebida. Sonrió y me dio un rápido beso en los labios. Vi cómo se alejaba hacia la pista y me obligué a girarme y pedir mi consumición.
¿Cómo se llamaba? ¿Volvería a seguirme si iba hacia otra parte? Tal vez a la zona de parejas...