Magia
Cada centímetro de mi piel lleva tu olor impreso, grabado.Es como si hubieras cambiado mi código genético.
Cierro lo ojos y tus manos vuelven a presionar mi cuello. A tirar de mi pelo. A arañar mi piel.
Tu polla vuelve a penetrarme de todas las formas posibles, movimientos rítmicos de dos cuerpos sincronizados como un reloj de cuerda al antojo del relojero.
Tu boca dejando huella en mis labios.
No había entre nosotros cazador o presa. Ambos cazadores en el mismo juego. Ambos presas sometidas al deseo, a la necesidad de poseer.
Sin miedos innecesarios.
Tan sólo vivir el momento que la vida nos regala para grabarnos en la piel del otro.
Grabados contenidos para no arrancar la piel a tiras, para controlar la violencia del deseo.
La necesidad de ser tuya, de ser tu fuente de placer. La necesidad de que mi placer sea tuyo.
Electricidad, pasión, deseo, violencia, ternura, complicidad.
“Pura magia”