La prueba (año 2019)
Estimada señora:Como recordará, en fechas recientes, le trasladé mi oferta de suscripción de un contrato de dominio y sumisión erótica.
A la vista de su interés en dicha oferta, puesto de manifiesto a través de su atenta respuesta, le comunico mi decisión de someterla a una prueba de selección, con el fin de poder determinar su aptitud como sumisa.
Esta decisión ha sido adoptada tras valorar su experiencia declarada en el campo de la sumisión, la correcta realización, en general, de los test de sumisión que se enviaron y las diversas fotografías de su cuerpo desnudo que ha tenido a bien remitirme. Espero que comprenda que, pese a la positiva evaluación que ha merecido su solicitud, la realización de una prueba presencial resulta absolutamente imprescindible para poder apreciar de forma objetiva cualidades como su atractivo físico, su grado real de servilismo o la calidad de los servicios sexuales que esté dispuesta a prestarme.
Para la realización de dicha prueba deberá presentarse en la puerta del hotel xxxxxxx, sito en la avenida xxxxxxxxxx , el próximo viernes 4 de octubre, a las 9:30 horas.
La prueba se llevará a cabo en una habitación del hotel, garantizando en todo momento su comodidad e intimidad.
Desde el momento en que entre en el hotel se entenderá que la prueba se ha iniciado, debiendo observar a partir de entonces un comportamiento sumiso. No se exige el tratamiento formal de usted ni el uso del apelativo “señor”, aunque se valorará especialmente su empleo sincero.
Deberá presentarse debidamente aseada, arreglada y vestida, permitiéndose el uso moderado de maquillaje y perfume.
No se exige un tipo de indumentaria específica, pudiendo elegirla usted libremente, salvo en lo referido a la ropa interior, respecto de la cual habrá de observar las siguientes reglas:
a) Deberá evitar el uso de ropa interior excesivamente sofisticada o provocativa
b) Deberá llevar sujetador y bragas. No le está permitido el uso de tanga o culotte. El uso de medias es opcional.
c) A mayores, deberá llevar en el bolso tres bragas más, a fin de poder efectuar, si se le ordena, una breve exhibición con los diferentes modelos escogidos.
d) Para el caso de que vista pantalones, se le recuerda que deberá bajárselos hasta los tobillos, sin necesidad de una orden previa por mi parte, tras entrar en la habitación. No obstante, debe tener en cuenta que no deberá bajárselos hasta que yo haya tomado asiento frente a usted, de manera que pueda observar tranquilamente cómo lo hace. Hasta que no lo haga, no le dirigiré la palabra ni daré inicio a la prueba. En todo caso, se le advierte que esta regla no es una sugerencia implícita para que lleve pantalones, sino únicamente una norma ritual derivada del tradicional carácter masculino de esa prenda. La elección entre falda o pantalón le corresponde a usted libremente, y no es mi deseo condicionarla en modo alguno.
El contenido de la prueba será el siguiente:
1º) En primer lugar, se procederá a someterla a una detallada inspección física. Se advierte expresamente que para la realización de dicha inspección estará obligada a desnudarse por completo y a exhibirse en las posturas que se le indiquen en cada momento. Asimismo, el examen incluirá la inspección ocular y la realización de tocamientos en sus partes íntimas, sin excepciones ni limitaciones de ningún tipo.
2º) Paralelamente a su examen físico, deberá responder a las preguntas que se le formulen acerca de su salud, aficiones y experiencia sexual.
3º) Concluido el examen inicial, se procederá a someterla a una serie de ejercicios de sumisión, cuyo contenido se revelará durante la prueba, a través de los cuales deberá demostrar su habilidad en la prestación de servicios sexuales, su obediencia y su disposición a ser humillada sexualmente. Para la valoración de estos ejercicios se valorará especialmente el mantenimiento de una actitud servil y complaciente. En especial, esta actitud deberá manifestarse de forma verbal, en su forma de expresarse, que deberá ser respetuosa en todo momento. En particular cada vez que se le dé una orden (y salvo que dada la situación ello resulte imposible o improcedente) deberá, previamente a su ejecución, responder utilizando fórmulas como “lo que usted mande, señor”, “ahora mismo, señor”, “si, señor, enseguida” u otras similares, o sus equivalentes en caso de que me tutee. Por lo demás, a lo largo de la prueba podrá expresarse libremente, siempre que mantenga un tono y modales serviles, procurando el uso de un lenguaje cuidado, sin abusar del empleo de palabras soeces.
4º) Los ejercicios de sumisión a los que será sometida observarán en todo momento los límites establecidos por usted en su solicitud. En todo caso, y para su seguridad, en cualquier momento de la prueba podrá usted utilizar las palabras de seguridad “amarillo” o “rojo”, según proceda, conforme a los usos y prácticas reconocidos en el mundo del BDSM.
5º) Me reservo el derecho a castigarla durante la prueba, tanto en caso de desobediencia como en aquellos supuestos en que aprecie un grado insuficiente de sumisión o de atención a las órdenes e instrucciones que se le impartan. Los castigos podrán consistir en la aplicación de penas corporales, tales como bofetadas o azotes en las nalgas, los pechos, la espalda o las plantas de los pies, que podrán eventualmente causarle un dolor físico moderado, o en humillaciones especialmente intensas.
Sin perjuicio de lo anterior, y tal y como se le comunicó en cartas anteriores, durante la prueba será en todo caso castigada por las faltas cometidas durante el proceso de selección, cuyo contenido se le recordará oportunamente.
6º) Al tratarse de una mera prueba inicial, no se exigirá un cumplimiento pleno de las normas de conducta que le fueron transmitidas a través de los test de selección previamente realizados por usted, pero se valorará especialmente el grado de conocimiento que sea capaz de demostrar al respecto.
A estos efectos, se le recuerdan las siguientes normas básicas:
a) Sus bragas son su prenda de vestir más importante. Salvo que se le ordene específicamente quitárselas, en todos los casos en que se le ordene desnudarse sus bragas serán la última prenda de que se despojará, debiendo previamente preguntarme si deseo que se las baje.
b) La felación se practicará de rodillas, procurando al mismo tiempo levantar el trasero todo lo que pueda. La duración de este servicio será indefinida, hasta que se le ordene concluirlo, sin perjuicio de las pausas de descanso que pueda hacer para recobrar el aliento, durante las que deberá en todo caso lamer mis genitales e ingles. La felación se realizará sin preservativo, pero no estará obligada a tragar mi semen, en atención al límite indicado por usted.
c) Para la práctica del beso negro, deberá tenderse boca arriba en el suelo, con las piernas abiertas y flexionadas y la lengua fuera, a la espera de que me siente sobre su rostro.
d) Concluido cualquier castigo, deberá darme las gracias y, acto seguido, pedirme permiso para la realización de un beso negro, describiéndolo literalmente como el acto de lamerme el agujero del culo.
e) Si se le ordena disponerse a ser follada, deberá tenderse boca arriba, abierta de piernas y levantando éstas todo lo que pueda, sujetándolas por las corvas, salvo que se especifique otra postura. En todo caso, será follada con preservativo.
f) En el momento en que yo vaya a ponerme un preservativo para realizar cualquier acto de acceso carnal, deberá ofrecerse a colocármelo con la boca. En caso de que su oferta ritual sea rechazada, deberá colocarse en la posición de espera activa.
A estos efectos, se le aclara que la posición de espera simple consiste en colocarse a cuatro patas y con el culo al aire. La posición de espera activa es igual, pero con las piernas abiertas, las rodillas lo más cerca posible de la cabeza y la cabeza apoyada en el suelo o colchón.
g) Durante la prueba, y hasta su conclusión, estará a mi entera disposición. En caso de que necesite usar el baño para orinar o asearse, deberá pedir permiso previamente y dejar la puerta completamente abierta, de modo que pueda ser observada en todo momento.
h) Concluida la prueba, no podrá vestirse hasta que yo lo haya hecho y sea autorizada para ello. En todo caso, deberá pedir permiso para ponerse las bragas, determinando yo cuáles – de las cuatro que debe traer a la prueba (una puesta y tres más en el bolso) - debe ponerse para ir a trabajar.
i) Las bragas que use durante la prueba podrán serle confiscadas como recuerdo, previa indemnización en metálico que usted fijará libremente en el acto. El pago y la entrega de la prenda se realizarán en el modo que usted indique, que podrá implicar un acto de humillación sexual de mi persona.
En caso de que no disponga de dinero para abonar la indemnización, le pediré disculpas por la ofensa que ello pueda suponer para usted, y aceptaré la humillación o castigo que me imponga por ello.
j) Al inicio de la prueba, se le preguntará si tiene la menstruación. En caso afirmativo, deberá previamente quitarse el tampón o compresa en mi presencia, y lavarse sus partes íntimas. No obstante, y dado que esta condición no le fue comunicada previamente, queda sujeta a su aceptación.
Concluida la prueba, se le informará de su resultado. En caso de que la supere, será invitada a comer conmigo a primera hora de la tarde. En el curso de dicha comida, entre otros detalles, se procederá a la negociación de su contrato.
Para resolver cualquier duda o aclaración que desee, estoy a su disposición.
Sin otro particular, esperando poder saludarla el próximo viernes, reciba un cordial saludo.
F.