EXPLORARTE
Eso es lo que quiero, lo que necesito. Las yemas de mis dedos desean recorrerte por entero, necesito reconocer al tacto la tersura de todos y cada uno de los rincones de tu piel, sentir su suavidad, su calidez. Escudriñarte, al tiempo que te excito, al tiempo que mientras lo hago, me miras, me detengo, y me preguntes “¿por qué paras?, sigue”, y vuelvo otra vez al placer, a la excitación que me produce acariciarte. ¿Qué es lo que tienes para que me guste tanto? ¿Por qué no soy capaz de parar? ¿Cuando fue que me volví adicto a tu cuerpo?Sólo lo sabías tú, pero ahora, en este momento, me he dado cuenta de que yo también lo sé, fue cuando te acaricié por primera vez, cuando te besé por primera vez, cuando te desnudé por primera vez, fue en ese preciso instante cuando caí en las redes maravillosamente tejidas de tu cuerpo, del que ya ni puedo ni quiero escapar.