El poder de unas bragas

El poder de unas bragas
EL PODER DE UNAS BRAGAS

Tenía 23 años y era virgen. No había tenido juventud. Las pajas habían sido su cotidianidad sexual. Y no es que fuera feo, pero a los 14 años una psoriasis de caballo le destrozó el rostro. Aquellas manchas blancas, aquellas aureolas rojas tiraban para atrás a las chicas, a las mujeres. Víctor soñaba con ellas, se masturbaba con el simple recuerdo de una minifalda...pero, ay, desgraciado, hasta eso le estaba vedado: las pajas le producían brotes agudos. Había decidido masturbarse cada tres días...él lo hubiera hecho tres veces al día…
Así pasó su juventud. Con un hambre de hembra descomunal. Ellas lo miraban con repelús, él se apocaba y se sumergía en otras pasiones: el futbol, los libros...Estudió filología hispánica, y a los 23 años, virgen hasta de labios, empezó a trabajar en un instituto.

Txell era una morena culona, con unos labios carnosos. 37 años y habiendo vivido con cuatro hombres diferentes, Profesora de catalán en el mismo instituto que Víctor, Txell era una mujer buena, lista, experimentada. Se fijo en Víctor, lo midió rápido y decidió iniciarlo; más por compasión que por deseo. Víctor no la ponía nada

Quedaron un sábado. Era un problema para Txell, con un tipo como Víctor su chocho iba a estar más seco que el desierto del Sáhara. Aunque cerrara los ojos, no era tan fácil meterse una polla de un nene de 23 años sin lubricación. Txell era vegetariana y reacia a meterse ayudas en el coño. Pero unos días antes había tenido una experiencia gratificante`. No se limpió bien el culo, se calzó las bragas y el picor de la mierda reseca le abrió las ganas de follar: “ Guai, me pica la raja del culo y tengo el chichi a cien . Me hace falta una buena polla…” No tenía a ninguno de sus amigos a mano, pero sí unos deditos bien bonitos con los que se masajeó el clítoris como una posesa
Llegó el sábado esperado durante 23 años por Víctor. Esa mañana el chico tuvo que esforzarse para no pajearse pensando en el culazo de Txell. En ese mismo momento el culazo de Txell derramaba mierda en la taza del wáter. La filóloga de nuestra historia se limpió sin ahínco su espléndido ojete, aún había trazos de caca en el último trozo de papel higiénico que utilizó la hermosa mujer. Nuestra filóloga se encasquetó las bragas, a sabiendas que estaría todo el dia con un ardor que la pondría más caliente que el palo un churrero.
“ Perfecto-pensó- esta noche tendré el chichi bien mojadito. Cerraré los ojos y pensaré en la polla de Rocco Sifreddi cuando Víctor me la meta “
Llegó la noche. Cenaron, fueron al teatro, y , en un bar del barrio gótico, Víctor intentó besarla. La filóloga le hizo una buena cobra. Txell sólo llevaba un cubata.
• Víctor, hay gente delante- se defendió la “ pudorosa “ profesora. Tres cubatas más tarde, con Txell bien colocada, Víctor probó por fin los labios de una mujer.

Cuando la profesora propuso a su colega acabar la noche en su casa, Víctor sintió ganas de llorar. ¡ Por fin podría realizar el máximo de sus sueños: follar con una mujer

El culazo de Txell era el sueño de Víctor. Nuestro protagonista fantaseaba con culos femeninos, eran su pasión. Devorándola a besos se metieron en la cama: labios, tetas chichi, pies, culo...todo fue saboreado por Víctor con el ansia de la primera vez, con las ganas del que ha padecido el hambre de hembra de manera reiterada y acuciante. Cinco veces se corrió el chico...la metía y se corría, no sabía. Exhausto intentó empalmarse una sexta vez. Había que aprovechar la oportunidad, quizás no se repetiría en otros 20 años. Pero la polla no se le ponía dura. Al borde de las lágrimas, nuestro profesor se levantó de la cama y vio, tiradas en el suelo, las bragas bien cagaditas de la bella filóloga. Su erección fue súbita y brutal. Tan salvaje como las fuerzas y la desenvoltura que el apocado protagonista de nuestra historia reunió de un golpe para meter su verga en el maravilloso culo de la filóloga, que gozó como una perra, descubriendo el enorme placer del sexo anal.

Así fue como Txell, la buena profesora, reveló, gracias a un “ tonto “, y al poder de unas braguitas cagadas, las delicias del sexo por el culo..

Pasarìan los años´. Al bueno de Víctor se la chuparían, le meterían la lengua hasta el fondo...incluso participaría en tríos, orgías y acabaría, quién lo hubiera dicho, por ser miembro de JOYCLUB. Pero nunca olvidaría el día en que él, el pobre profesor apocado y virgen, enseñó el placer del sexo anal a una hembra experimentada.
*******ICE Mujer
1.881 Publicación
Si es q... nunca se deja d apfender d los demas.
Muy buen relato
Nadie sabe que nos puede excitar hasta que lo vemos. *bravo*
*********ntom Hombre
923 Publicación
Sería demasiado facil decir que esto es un relato un poco de mierda...pero no lo haré, porqué no es así...es escrito muy muy bien y, a parte la imprevisible contribucion de la mierda a la excitacion sea femenina sea masculina, es hermoso que aquí se haga ver como tambien un amante inexperto puede ensenar alguna cosa a quien es más experto
Cita de *********ntom:
Sería demasiado facil decir que esto es un relato un poco de mierda
. En realidad sí que lo es. Es un relato escatológico y emotivo. El primero de los relatos que escribí en este grupo, y que no aparecía, no sé porqué, en mi perfil ( llevo un total de catorce ). Y es mierda en un doble sentido: primero por la utilización de palabras que se usan en la cotidianeidad de la calle ,y luego por la vida de mierda que lleva Víctor hasta calzarse a Txell. También porque para Víctor. con un hambre descomunal de hembra, cualquier excrecencia del cuerpo de una mujer es un sueño. El lubricante de un deseo animal.
Deciros que me ha " prestado " el lenguaje el escritor cubano Pedro Juan Gutiérrez. Os pongo aquí un fragmento del cuento " Con Basilio en la misma celda " del libro " Trilogía sucia de La Habana " que @*********ntom, es "mucha mierda":
- Ay, Papito, ¿hasta cuándo me ibas a castigar ?
Me bajé los pantalones. Le quité la blusa y los pantalones. Nos manoseamos un poco. Se la metí en la boca y me decía:
-Oh, pinga sucia, la tienes sucia, qué apestosa está. ¡ Pero qué dura, que cabezona!
Y la chupaba magistralmente.
Entonces se me ocurrió hacer lo que me gusta siempre: entrarle por atrás y, de pie, hacerla que se doble por la cintura hacia adelante. Eso me vuelve loco. Pero cuando lo hizo las nalgas se le abrieron y del culo le salió mucha peste a mierda fresca. Se había cagado. Soy un puerco, pero no tanto. Se me cayó el rabo y me agarró una furia terrible. En un segundo me invadió el odio:
• ¡ Estás cagada, tienes peste a mierda en el culo !
• ¡¿ Yo ?!
-Cojones, te cagaste. Eres una puerca.
• ¡ Más puerco eres tú ! Tenías la pinga con peste y te la mamé !









******dos Pareja
972 Publicación
Moderador de grupo 
He de confesar que no es una situación que me agrade, (la falta de higiene no es lo mío) pero como dice @*******ICE tod@ el mundo puede enseñar algo, en este caso, el pobre del virgen "ganó" a la experimentada y me quedo con eso...
Cita de ******dos:
He de confesar que no es una situación que me agrade, (la falta de higiene no es lo mío) pero como dice @*******ICE tod@ el mundo puede enseñar algo, en este caso, el pobre del virgen "ganó" a la experimentada y me quedo con eso...
Dicen que el mejor sexo es el sexo sucio. A riesgo de parecer sexista quiero decir que tanto este relato como el anterior, " Soñando con la China ", están más cerca de la sensibilidad masculina que de la femenina. Y lo digo en un sentido general.
******dos Pareja
972 Publicación
Moderador de grupo 
Cita de **********stina:
Cita de ******dos:
He de confesar que no es una situación que me agrade, (la falta de higiene no es lo mío) pero como dice @*******ICE tod@ el mundo puede enseñar algo, en este caso, el pobre del virgen "ganó" a la experimentada y me quedo con eso...
Dicen que el mejor sexo es el sexo sucio. A riesgo de parecer sexista quiero decir que tanto este relato como el anterior, " Soñando con la China ", están más cerca de la sensibilidad masculina que de la femenina. Y lo digo en un sentido general.

No era una critica al relato eh! solo una puntualización sobre mis gustos personales, aquí caben todos los gustos, y por ende todos los relatos que no dañen a nadie, faltaría más! jeje y bueno no creo que sea sexista pensar que pueda ser mas enfocado a la sensibilidad masculina, besos!
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