CABALES

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No puedo entender que pierdas los cabales.
Jamas me han interesado tus avales.
Hoy el silencio araña otros cantares…

Unos que hablan de la deuda que la justicia poética tiene contigo.

Perniciosa hipoteca que perdura en las escrituras de mis deseos intrínsecos y somnolientos sobre tu piel tatuada por el tiempo.

Heridas abiertas,
secretos a voces…
son tus misterios.

Esculturales y míticos labios de fuego,
tu figura de hierro y seda
que nunca sueltan prenda.

No soy sumiso,
no me va la máscara de cuero.
A mi no me vas a tratar
como a un perro faldero.

Pestañas de mariposa animadas en 3d,
tus hombros de plegaria culposa y
esa voz de mando…
que me transporta pero me despista.

Ingravidez de película;
solo comparable con el tiempo
cuando se detiene en el espacio que hay entre mis suspiros y tus pupilas encrispadas por culpa del viento.

Maga de lo impredecible.
Superficial
pero profunda,
al mismo tiempo.

Leo tus anhelos y me adelanto a tus designios.
Violines desafinados y cantos de sirenas hambrientas.

Amanece y no me puedo callar,
porque el echarte de menos a la hora azul es un acto refrejo; cliché, delirio o simplemente la protesta airada de mi anhelo,
al notar la ausencia de tu cuerpo.

Es la psicodelia del deseo,
imágenes ardiendo en stereo.

Cabalgatas por misteriosos desiertos:
a veces cóncavos,
a veces convexos.

Tus caderas interpretando solos de vagina y chelo,
con ecos acompasados en esa extensión de mi alma que le encanta estar en tus profundidades oscuras,
muy adentro!

Me recreo como nunca
con tus acantilados empapados.
Ríos de tinta, sudor y tus sagrados fluidos.

Es la catarsis de nuestra atracción llevada al extremo.

Tus Montes de Venus disfrutando y mas,
recreación y deporte
todo el tiempo.

Coreografía de contorsión absurda
donde te alejas en éxtasis
y te acercas para respirarme… devorando mi aliento.

El tiempo se detiene

Sincronía de momentos, Inhalaciones al unísono y apneas profundas sin destino.

Una vez más me contradigo.
Se muy bien de donde vengo y para donde voy.
Mi origen es el paraíso maldito.

A donde voy?

Quiero llegar a nuestra burbuja de estrellas.
Ese rincón espacial
donde tu y yo profanamos las fantasías de ayer con el deseo de mañana.

Seguimos….