Tuya
Como te dije por chat, tus palabras me aterran…tanto como me remueven por dentro. Quiero ser tuya a un nivel que me asusta, estar a tu merced, darte placer y sentir placer bajo tus ordenes.Imaginarte tomándote tu tiempo después de habernos deseado tanto, para atarme, para deslizar tus dedos por mi cuerpo despacio, retrasando cada uno de tus instintos, esos que te hacen mi animal…Recoger mi pelo, para que nada te impida el acceso a cada centímetro de mi piel, de rodillas.
Te siento detrás de mi, respirando tan cerca que tu aliento eriza mi piel, cada contacto medido, pensado, sintiendo cada segundo, cada instante, recreándonos en este momento que no sabemos si se repetirá. Hoy soy tan tuya y tu tan mío. No existe nada más.
Este mundo que tu me muestras, en el que me entrego a ti sin miedo y con todo el miedo, mi respiración acelerada, tu mirada salvaje, mis manos delante atadas, tu erección ante mis ojos, mi boca abierta, anhelándote, queriéndote sentir. Lo notas en mis ojos, sonríes sabiendo lo que pienso, lo que quiero, lo que ambos queremos, tiras de mi coleta hacia atrás, haciéndome soltar el aire y entras con tu lengua en mi boca, te toco con las manos y paras. Me sueltas, te alejas…”quien te ha dicho que puedes tocarme?” “acaso te di permiso?”…Mi cuerpo se tensa, me excita oírte de una forma visceral, incontrolada…paseas por detrás de mi y vuelvas a tirar de mi coleta, “Me has escuchando?” “no te he oído contestarme”….si, contesto….si ¿Qué?... Si Señor te digo muy suave…sonríes.
Vuelves al frente y pones tu pene a la altura de mi boca…”saca la lengua”…obedezco…Rozas tu polla con mi lengua, no me muevo, no quiero provocarte…”lamela”…y lo hago, despacio, al final me das permiso de disfrutarte, de darte placer, quiero oírte gemir, agarras mi cabeza, para sentirme más cerca…me miras, te miro mientras te recorro. “Métela dentro de tu boca”, me dices. Uhmmmmm….abro la boca y entras dentro de mi, cierro mis labios para sentirte y empiezo un movimiento que te hace gemir… “así te quería ver…mía...eres solo mía”. TE saboreo con ganas, estaba deseando tenerte para mi, me encanta sentirte, aceleras el movimiento de tu mano en mi cabeza, y me avisas que me prepare, despacio me penetras hasta que tengo toda tu polla dentro de la boca, la sacas y vuelves a hacerlo, entera, toda mía…
Sales de mi, mi respiración es muy intensa, noto que mi humedad aumenta, agarras mis muñecas y tiras de mi para levantarme, me tiras encima de la mesa las manos estiradas, siento un azote que me hace temblar, “duele?”, me preguntas…no sé que acabo de sentir, quiero más y te lo digo…más te suplico…y descargas de nuevo tu mano sobre mi…tres veces seguidas, mi cara apoyada en la mesa, las manos agarradas al borde, mi humedad es intensa…tocas entre mis piernas y me dices….”sabía que iba a gustarte, eres un animal, como yo”…estimulas mi clítoris intensamente, gimo sin poder controlarme, paras y me pegas de nuevo, ya no sé que lo que más me excita, siento tu cuerpo pegado al mío, tu polla entre mis piernas, tus manos en mi cuello, bajan despacio por toda mi espalda, dibujando las curvas, todas, incluso las que no pudiste ver en la foto de mi espalda…”no sabes cuanto he llegado a desearte”, me dices…y si lo sé, por que yo también lo necesitaba, necesitaba tu entrega, tu dedicación, tu descarga de rabia por tanto deseo acumulado… te alejas despacio otro golpe pero ya es el interior de mi vagina donde los siento…vuelves a acariciarme entre las piernas, pero lo haces muy despacio, me desesperas, me vuelves loca, no quiero suavidad, no de ti, quiero tu furia…
Como leyéndome metes tus dedos dentro de mi y lo haces de forma salvaje, y los mueves, levanto la cabeza y apoyo la frente en la mesa, grito, sale de mis pulmones sin poder evitarlo…
Sales de mi de nuevo…no sé cuanto voy a soportar este ritmo, siento como mi cuerpo necesita correrse, tener un orgasmo tan intenso que se me salten hasta las lágrimas pero lo quiero contigo dentro…te necesito dentro de mi, no puedo esperar más…te lo digo…”te quiero dentro de mi, fóllame por favor…”..No hay respuesta, vuelves a agarrar mi coleta y me levantas…me tiemblan las piernas, me das la vuelta con las manos levantadas por encima de nuestras cabezas vuelves a devorar mi boca, me hace daño tu intensidad, pero me acerco a ti, quiero tus marcas, quiero llevarte tatuado en mi piel… agarras mi cabeza me sueltas y me vuelves a colocar de rodillas, no hablas, me metes la polla en la boca que devoro para crearte tanta necesidad como la que yo tengo, sujetas mis manos por encima de mi, metes mis dedos en tu boca, me muerdes, te lamo con todas las ganas de miles de amantes. Te separas de mi, me das la vuelta para que quede mi espalda delante de ti…te pones de rodillas… me tiras hacia delante, abres mis piernas y me penetras, , apoyo mis manos, mi cara en el suelo, me abro a ti, me ofrezco para tus embestidas y me tomas…me penetras con furia, me llenas, me tiembla todo el cuerpo, mis rodillas arañadas por el suelo, se mueven al ritmo de tus penetraciones, me arañas toda la espalda, me marcas, vuelves a pegarme, una y otra vez, no se donde esta el limite del placer y del dolor, la sensación me arrolla, me envuelve, nunca había sentido nada tan intenso…no quiero que dejes de hacerme tuya. Tiras de mi coleta y levantas mi cuerpo sin sacar tu polla de mi, me agarras por delante, con tu brazo apretando mis tetas, con tu mano en pellizcando mi pezón, duro. Levanto las manos y agarro tu cabeza que me vuelve loca, me muerdes, grito. No me importa nada…tu otra mano baja por mi tripa hasta el interior de mis piernas y empiezas a jugar con mi clítoris, no puedo más, me dejo a ti, puedes hacer conmigo lo que quieras…me follas fuerte, agarras con las dos manos mis pechos…cada vez más fuerte…voy a correrme, lo sabes, lo notas en tu polla, en las contracciones que la rodean, sigues más y más fuerte, más rápido, apoyo mis manos de nuevo mis manos en el suelo y grito, un orgasmo recorre todo mi cuerpo y tu no paras, me azotas intensificando todas mis sensaciones…no puedo sostener mi cuerpo más tiempo…”donde quieres que me corra?” te oigo decir y te digo que soy tuya, que estoy para ti, sales de mi y noto tus gemidos y eyaculación por toda mi espalda mientas me arañas las caderas, noto cada gota resbalando por mi piel…nuestras respiraciones se normalizan poco a poco…”Qué no se te olvide, eres mía, y te poseeré cuando así lo decida”. Y sé que nunca he sido tan mía y tan tuya al mismo tiempo…no lo olvidaré…tu marca recorrerá para siempre mi espalda en mi memoria