Tren

Siempre viajar en tren ha sido para mí relajante, no siempre el destino…hay algo enigmático en el movimiento. Hoy me subo inquieta, es como si supiera que no iba a ser un viaje como los demás…este no iba a olvidarlo.
Dejo mi maleta en la parte alta de mi asiento, saco el café que siempre me acompaña y preparo el viaje…ebook, cascos, playlist…y siempre ventana, reclino mi asiento, me acomodo. De repente siento que invades mi espacio, la cintura de tu pantalón está muy cerca de mi…colocas tu maleta en la parte superior también. Un hola, una sola mirada, esos ojos negros y mi viaje cambia en ese momento.
Te sientas a mi lado y noto electricidad, la notaras tu también?...intento escuchar música…¡Hazlo…como si ya no te jugarás nada…como si fueras a morir mañana!…Leyva no me ayuda con esta frase…surge en mi cabeza una idea que se me hace muy seductora. Saco el ordenador, lo abro y inicio el Word. Sé que tú puedes ver perfectamente lo que escribo. Siento tu mirada.
Empiezo a narrar una de esas fantasías que invaden mi cabeza, pero está vez escribo ese momento…escribo un viaje en tren...un acompañante…una mirada…Escribo como me doy cuenta de que no tenemos nadie al lado y que excitada deseo que tu mano entre muy despacio por debajo de mi ropa y ascienda por mi espalda cuando noto…como a mi lado subes el brazo de asiento que nos separa…noto tus dedos separando mi jersey para sentir mi piel… doy un respingo…es increíble…sigo escribiendo como deseo que esa mano desabroche mi sujetador para llegar a la parte delantera de mi cuerpo y es exactamente lo que haces como si estuviera acordado… noto tu mano en mi pezón, se pone duro inmediatamente al tacto de tu mano…no te miro, me dejo hacer, mi respiración se acelera de forma visible.
“Su mano sale de mi espalda y aparta el pelo de mi nuca, deja libre el cuello a merced del juego de sus dedos…”. Poco a poco tus dedos bajan por mi cuello y se deslizan mus despacio por mi piel, mi clavícula, mi hombro, deslizas la tira de mi sujetador, haciendo que se escurra y mis pechos queden fuera de el ya desabrochado, sientes como mis pezones se ponen duros. Yo noto como tu pantalón coge volumen, te estas excitando tanto como yo.
“Sé reclina sobre su asiento como queriendo mirar por delante de mi hacia la ventana y coloca su mano sobre mi rodilla, asciende por mi pierna desnuda hacia el interior de mis muslos…”
Siento tu olor, tu boca cerca de mi cuello, tu mano caliente haciendo que mi piel se erice, paro de escribir para poder abrir mis piernas y sentir como tu mano me recorre hacia el interior, estoy mojada, excitada, deseando continuar, no puedo creer que me este siguiendo el juego, delante de nosotros dos personas duermen plácidamente mientras nosotros jugamos a este juego de imitación, erótico y caliente.
Despacio me susurras…que viene ahora?, recupero la consciencia y sigo escribiendo con tu mano izquierda alojada en el interior de mis piernas, noto como tu dedo corazón se acerca a mis bragas.
“Sin parar, aparta mis bragas e introduce su dedo dentro de mi y lo mueve de delante a atrás en un movimiento que me hace temblar…”
No lo dudas, paro de escribir de forma súbita, ni una palabra más, quiero dejarme llevar, me reclino en el asiento y dejo que juegues dentro de mi sexo, que muevas tu pulgar en mi clítoris, mi falda de verano ya no estorba pero esconde tu mano. Parece que nada pasa pero mi excitación sigue en aumento, sonríes al mirarme, tus ojos me atrapan. Me dices, ¡sigue escribiendo o paro…!
Me incorporo como puedo y coloco mis dedos de nuevo en el teclado…No puedo pensar...sigues sin dejar de moverte y no puedo dejar de respirar acelerada.
“Giro mi cuerpo hacia la ventana dejando hacia ti mi culo, subes mi falda y y subo mi pierna de recha sobre la izquierda en una posición, que casi se podría pensar que duermo, echo mi chaqueta sobre mi cuerpo para que puedas dejar libre tu polla que lo está deseando, nadie nos ve, eres libre de pegarte a mi, de abrazarme, de apartar mi braga e introducir tu polla dentro de mi…”
Cuando lo lees siento come gimes de deseo, y hago exactamente lo que acabo de describir, quitas tu mano y me giro despacio, poniéndome de tal manera que tu solo tienes que pegarte a mi para tener acceso a mi vagina húmeda. Abres tu pantalón debajo de mi chaqueta, te giras y la noto en mi culo, noto tu mano derecha en mi pierna, entre ellas para subirla dejar mas abierto mi sexo. Mi cabeza casi esta apoyada en el cristal, todo es muy lento, silencioso, no cruzamos palabra, me agarro con la mano derecha en el borde de la mesa cuando introduces tu pene en mi interior, está dura, muy dura, una vez dentro agarras con tu mano mi cadera y empiezas a moverla, nos movemos a un ritmo perfecto, nos separamos y atraemos de tal manera que parece que llevamos haciéndolo mucho tiempo. Estoy empapada, me gusta como me siento. Tu mano firme en mi cadera y mueves la izquierda para agarra mi coleta y que levante la cara, sigues metiéndomela sin descanso, estoy muy excitada, noto que tu también, no puedo creer que este haciendo esto en un tren, en cualquier momento podría pasar alguien, aunque solo quedándonos quietos disimularíamos lo que ocurre debajo de la chaqueta, solo dos personas giradas mirando por la ventana.
Pero tu polla está dentro de mi.
Empiezo a sentir que es demasiado, me tiemblan las piernas, y muy bajito te digo que me voy a correr y dices que juntos lo haremos. No puedo retrasarlo más. Muerdo mi mano izquierda para ahogar el orgasmo que me invade y tu abres la boca queriendo gritar sin soltar un solo sonido. Das las ultimas embestidas para volver a la normalidad y sales de mi, despacio….muy despacio. Te giras y cierras tu pantalón. Yo me quedo de lado tapada con la chaqueta, notando tu semen dentro de mi, disfrutando la sensación de lo que acabo de vivir. Cierro los ojos justo cuando oigo alguien a mi lado que dice…”billete”. Te dice que ese no es tu sitio, que te has equivocado de vagón….noto como te levantas y coges tus cosas. Cuando abro los ojos estoy sola, pero las palabras en el ordenador me recuerdan que ha sido real…