Running

Una mañana más salí a correr para quemar el exceso de calorías del fin de semana. Como hacía calor me puse un pantalón corto sin ropa interior y una camiseta ajustada. Comencé a correr con desidia y desgana por mi ruta habitual, un campo poco transitado con algún árbol y matorrales secos. Sudaba porque el calor empezaba a apretar. Buscaba llegar a uno de esos árboles para poder descansar y hacer unos ejercicios a la sombra. Justo cuando me acercaba a mi ansiada sombra oí ciertos gemidos que me soliviantaron. Mi sorpresa fue mayúscula al ver apoyada en el tronco a una hermosa mujer con las piernas abiertas y jugando con un aparato que parecía ser el famoso satisfayer. No se dio cuenta de mi presencia y pude observar su hermoso sexo y su clítoris a flor de pie. Yo llevaba bastante tiempo de abstinencia, y note como mi pene estallaba en el pantalón. Comencé a masturbarme con desesperación sin que ella aparentemente se percatara. Me corrí sin ser consciente de ello y entré en pánico al comprobar como ella había sido testigo visual de mi ..... Entonces me miró y dijo: "¿Ahora que hacemos?". No supe contestar y mi rostro enrojecido bajo la vista. En ese momento pude sentir como su boca comenzaba a jugar con mi flácida polla. Esta empezaba a responder y zas una sorpresa más, me metió varios de sus dedos en mi ano. ¡Que gusto tan bárbaro!. Nunca me habían hecho eso, pero me gustaba a horrores. Eyaculé sin más y su presencia se desvaneció. ¿Sueño o realidad?.
Cada día que salgo a correr busco la sombra del árbol esperando encontrar mi sueño.