Blowjob sensations.
Qué curioso... pensó ella mientras subida en un 69 sobre él contemplaba la saliva escurrir verga abajo hasta la mano con la que le apretaba la bolsa y levantaba los testículos para lamerlos de vez en cuando...Sí, curioso ver cómo cada subida y bajada de su boca a lo largo del tallo de carne era seguida por una contracción, que la volvía aún más dura y turgente...
Mmm...mmm ..le oía gemir, aplicado a su vulva intentando inútilmente devolver lo que ella le estaba regalando, aferrado a sus nalgas entreabiertas empinadas hacia arriba...pocos hombres le habían sabido comer cómo le gustaba...en fin.. le dejó hacer y se aplicó a practicar lo último que había leído en aquel manual taoísta...
Retención de semen...¿Y eso?...a ver, había que ... sí...apretar a medio camino entre el ano y la bolsa...su mano derecha seguía empuñando la bolsa, pero la izquierda libre buscó el punto....y presionó con los cuatro dedos largos, rígidos...a la vez, se sacó casi completamente la verga, apoyó la punta la lengua en el ojo sin niña, separó levemente como escarbando los mamelones del glande y penetró lo que pudo en la salida del pene...entonces bajó la cabeza sin retirar la lengua, notando el orificio completamente cerrado por ella misma... bien...lo tenía...
Retrocedió, seguía sintiendo un placer soportable en su sexo, que se volvió más atenuado cuando se concentró en lo que iba a hacer...
Empezó a subir y bajar, la mano derecha abandonó la bolsa y agarró la barra, lubricada en saliva de largos minutos apenas tenía resistencia...el pene brillaba renovado en cada embestida, y su respiración empezó a ser más profunda, acompasada con sus paradas en la base del pene cuando se la comía por completo...
Ya lo tenía fuera de sí, la había abandonado, su cara la notaba refugiada en uno de sus muslos, y los dedos de él clavados en sus nalgas eran garfios acerados...
el muy perro
...su sexo se enfriaba y secaba, y quería correrse, así que decidió apurarse...
Apretó los labios contra los tres tubos del pene, dos pétreos, uno moldeable, y con la lengua enroscada al subir, acarició el frenillo...el efecto fue inmediato... él perdió el control de sus caderas y empezó a percutirla rítmicamente... quería correrse el hijo puta...ahora verás...
Notó el pene empezar a estallar... ¡ahora!... clavó los dedos largos en el punto que había leído...y dejó de recorrer la verga, quedándose a medio camino y notando los espasmos que nacían sacudir la polla en su boca...
El aullido de él la sorprendió...
¡Perra, no pares, suéltame!...
y agarrándose a ella con más fuerza quiso utilizarla para follarle la boca y correrse, olvidado ya en el egoísmo de su propio orgasmo ...
Ella se defendió...con la mano izquierda bajo la nalga apretó aún más entre el ano y la bolsa, con la derecha inmovilizó su boca sobre el pene y con la lengua tapó la salida del semen...que pugnaba por subir pero que ya notaba retroceder...
¡Aaahhh, amhhhhh, arghhh... suéltame, suéltame!...gritaba fuera de sí....¡Me lo has cortado, perra!...
y ahora sí, ella le soltó y se bajó...
Él, incorporado en la cama a medias, farfullaba con su cara enrojecida, la polla a punto de estallar, vibrando de la sangre que contenía, sin entender nada...
¿Por qué, pero esto a qué viene?...
Y ella, consciente del poder que había descubierto, no tuvo más remedio que decirle:
Ahora... me durarás lo que necesito, y cuando me haya corrido yo, será tu turno...
Calla y cómeme...perro...