Choque de espadas I "por Tut"
Oakes estaba en pie viendo como la vida se marchaba de su enemigo, otro joven demasiado atrevido e inexperto para retarlo a un combate por el liderazgo. Sin darle más vueltas soltó la espada y se marchó de la zona de combate moviéndose entre la gente con la idea de llegar a sus aposentos para poder lavarse y disfrutar de la compañía de su amada Evelyn.Las puertas se abrieron, su corazón comenzó a latir con fuerza. Salió de la cama con rapidez para comprobar quién entraba, era Oakes su amado. Se abalanzó sobre él a pesar de estar lleno de sudor y sangre, comenzó a besarlo con pasión. La espera por saber si iba a volver a ver a su hombre hacía que no pudiese esperar para poder volver a sentirlo cerca.
Ambos se fusionaron en un abrazo y un beso intenso, sus manos recorrían sus cuerpos con pasión y fuerza. En un arrebato Oakes la apartó unos centímetros y de un tirón le quitó su túnica dejando su esbelto cuerpo desnudo, la admiró durante un instante para seguidamente cogerla en brazos y llevarla con fuerza hasta la cama. La arrojo sobre las mantas y se quitó los pantalones, dejando su cuerpo totalmente desnudo. Evelyn se reincorporó y se acerco a Oakes, puso sus manos sobre su pene y comenzó a masajearlo, notando como poco a poco este iba creciendo entre sus manos. No tardó mucho en empezar a crecer, y la boca de Evelyn no pudo aguantar más la tentación de comenzar a lamerlo. Su lengua empezó a recorrerlo entero mientras una mano lo sujetaba con fuerza y otra le acariciaba los testículos. Cada vez que ella se lo introducía en su boca y chupaba, Oakes no podía resistir soltar un suspiro de placer. Ambos sentían una gran excitación que iba creciendo por momentos, Oakes sentía su pene estaba duro como una roca y Evelyn sentía como la humedad inundaba su coño estaba.
Oakes no pudo aguantar más, agarró con fuerza a Evelyn y la giró, quedando ella a cuatro patas delante de el. Puso sus manos con fuerza en las perfectamente esculpidas nalgas de Evelyn, y en un arrebato de pasión la empezó a penetrar con fuerza. Ella notó como el pene duro de Oakes se introdujo sin problemas en su húmedo coño, y empezó a gemir con cada embestida de su amado. En medio de la pasión, ella adaptó la postura de su cadera para notar el golpeteo de los testículos a mayores del pene penetrandola. Ambos estaban sintiendo el placer, mientras el pene duro de Oakes entraba y salía del coño húmedo de Evelyn.
Oakes se detuvo y se tumbó boca arriba al lado de Evelyn. Esta sin mediar palabra se puso encima de el, y se introdujo su pene para comenzar a cabalgarlo, ahora era ella la que llevaría el ritmo del placer. Las manos de Oakes comenzaron a recorrer el cuerpo de Evelyn desde sus muslos hasta sus pechos que se movían al compas del galope de Evelyn. Los agarró con fuerza, acariciandolos y apretando los pezones sin avisar.
El movimiento de Evelyn sobre Oakes, estaba haciendo que ambos estuviesen llegando al límite. El se incorporó de golpe y comenzó a comerle sus preciosos pechos, la lengua recorría los pezones duros de Evelyn mientras esta no podía parar de cabalgar sobre aquel imponente pene. El ritmo empezó a aumentar gradualmente hasta que el orgasmo de ambos llegó. Ella notó como todo el semen de Oakes la llenaba en un momento de éxtasis y placer inmensos.
Ambos se detuvieron pero se mantuvieron abrazados dándose unos besos antes de caer desfallecidos en la cama. Ambos respiraban con fuerza, necesitaban recuperar fuerzas había sido un día de mucho estrés y preocupaciones, y aquel momento de pasión les había dejado con una sensación de paz que agradecían y estaban disfrutando. Una paz que duro poco, ya que en ese justo momento entró su fiel sirviente Landon.