Acaso?
Hola!Comparto por aquí también mi primer relato:
"Alguna vez la encuentro por el mundo
y pasa junto a mí
y pasa sonriéndose y yo digo
¿Cómo puede reír?
Luego asoma a mi labio otra sonrisa
máscara del dolor,
y entonces pienso: -Acaso ella se ríe,
como me río yo."
(G. A. Bécquer)
El aroma a tierra mojada y humedad se adueñan de mis sentidos durante el primer trayecto del día. Unas tímidas gotas de semblante inofensivo calan entre mi pelo terminando de humedecerlo. Paso a paso avanzo, dejando atrás esa cueva saturada de figuras cabizbajas y túneles interminables. Mis ojos se entretienen buscando un charco tras otro, donde observo el cielo teñirse de gris y la figura del sol palidecer de forma solitaria.
En el estrecho espacio repleto de personas haciendo cola para recibir su dosis de amargura matutina, me cuelo como si me deslizase entre estatuas por un cementerio, dejando caer una sonrisa. El murmullo estridente me satura, como si de radiación se tratase. Mi círculo me rodea, yo juego con el café y doy un paso atrás, nada complace mi mirada, por lo que la desconecto y aguardo ese sonido.
Y ahí está. Primero ladeo ligeramente la cabeza y dejo que las notas que se deslicen por el espacio, entre los cadáveres, y como cada mañana lleguen a mi de forma clara y limpia. El mundo se hace pequeño, vuelvo a sentir que hay algo de vida fuera de la puta rutina. Ahora te escucho mejor, ya casi puedo descifrar que en 4,5 segundos pasarás por mi lado. Doy otro paso atrás, tu das tres pasos y avanzas.
"Hey" – digo.
"Morning" –respondes.
"It's so crowded in here"
"Yeah, must be the rain"
"Looks like today will be insanely busy (yet again)"
"Yeah, I've got so much to do already… Can you believe Steve asked for the same stuff again?"
"You got this. Oh and step one row back if you need backup"
"Aw, thanks! Have a lovely day" –dices tras una breve risa.
Si tu navegas por el mar, yo estoy en la orilla. Algunas veces creo que puedo escuchar tu voz, tu verdadera voz, colarse entre líneas, más allá de las miradas y susurro para mis adentros: "puedes oírme? puedes oírme?"
Camino de vuelta a casa, las luces se apagan tras mis pasos, y de repente te conviertes en un viejo sueño, en alguien desconocido, tu sombra se siente como la lluvia de aquella mañana, nada es lo que parece. Y una última pregunta da vueltas en mi cabeza: acaso ella se ríe, como me río yo?