Jaque

Y supe en pocas frases que estaba delante de un rival de los que no es fácil encontrar. Entera, fuerte, sexual, sensual, decidida.
Juego contigo, pero esta vez ante un digno adversario, quiero verte rendida, entregada, quiero hacerte mía, como reza tu tatuaje, tatuaje que voy a recorrer con mis dientes, dejándote mi sabor impreso.
Mi cuerpo reacciona a ti, a tus mensaje, a tu forma de escribir. Leo tus relatos y sé que quiero horas de tu piel, de tu saliva, de tu olor.
Quiero grabarte en mi mente.

Ya no soy consciente de cómo pasan los km, es como si tu me atrajeras, un magnetismo parecido al que hay entre la luna y sus mareas.

Fijo la vista y te sacudo de mi mente. Apenas unos minutos me separan de ti.

Me llega un mensaje y mi cuerpo se eriza, sé antes de leerlo que eres tu.

"La 242" - pones

Mi cerebro explota ante la idea de tenerte delante.

Aparco, cojo la maleta que ella me hizo con dedicación pensando en que tenga todo lo necesario en mi viaje de "empresa". No puedo pensar en esto ahora. El animal que soy aparta todo pensamiento de mi cabeza que no sea poseerla.

Entro en el hall y creo que mi cerebro ya es capaz de detectarla. Cojo el ascensor y veo cuando le doy al 2 que está rodeado de pintalabios rojo. Me hace reír tu descaro.

Llego a la puerta y veo que está entornada, apenas se percibe si no estás delante. Empujo la puerta y entro. Dejo la bolsa en el suelo y olfato el aire buscándote. Has cerrado las cortinas, no hay luz. Quieres jugar!!

"Estoy aquí " dices desde el fondo de la habitación. La puerta del baño deja entrar un hilo de luz y puedo verte sentada en la cama. Tu lado derecho es apena una silueta, pero veo lo suficiente para ver que estás en ropa interior.

"Quieto ahí" me dices autoritaria, y me quedo clavado, expectante.

Te levantas, noto tu mirada fija en mi

Te acercas, veo las sandalias de tacón que en su momento me enseñaste en foto y me parecieron realmente sugerentes.

"No me toques"


Empiezas a desvestirme, puedo olerte, quiero saborearte, fundirme en tu saliva. Camisa fuera. Te pones en mi espalda, tus manos acariciando con fuerza mi cabeza, entre mi pelo, bajan por mi nuca, mis hombros, mi espalda, la cintura de mi pantalón, me rodeas desde detrás y abres el cinturón, tus manos entran por los laterales de mi cintura arrastrando todo lo que sigue tapandome. No sé cómo es posible pero mi erección es evidente.
Me muerdes el culo y te ríes, esa risa que he escuchado tantas veces en el manos libres de mi coche, en los audios de mi móvil a escondidas.

Te pones delante de mi, segura, cerca, cada vez más cerca, puedo saborear tu olor. Haces el amago de acercarte a besarme y bajo la guardia abriendo los labios pero te apartas para hacer que ya no soporte más esta espera...en ese momento pierdo los papeles y te agarró del pelo y el cuello al mismo tiempo y penetro tu boca.

Es violento, es animal lo que despiertas en mi, te devoró con un ansia que no sé si había sentido, eres mía, aquí y ahora, quiero saciarme de ti hasta que los astros vuelvan a alinearse y unas horas no son suficientes.

Bajo por tu cuello, mordiendo, oigo tus gemidos en mi oído y me encienden hasta perder la noción de todo...

Te empujo sobre la cama, abro tus piernas y me entierro en ellas, tu sabor lo conocía de tanto imaginarlo, tus manos tiran de mi pelo, noto tu cuerpo revolviendose, no pienso parar, quiero beberte, quiero llenarme de ti. Meto mis dedos para reconocer tus esquinas mientras te miro un momento, eres cuanto imaginaba y más aún por que eres real.

Vuelvo a torturarte con mi lengua hasta que noto que me invades entregandote a mi, arañandome, arañando las sábanas.

No te dejo respirar, quieres tocarme y te apartó las manos. Busco en el pantalón un condón, me lo pongo y te penetro. Solo una vez, respiro, te siento, agarró tus caderas, dejo que te incorpores, nos besamos de nuevo con ansia y vuelvo a empujarte.

"Usame, soy tuya" me dices en un susurro.

Y pierdo la cabeza, mis embestidas ya no cesan, una y otra vez, mientras saco tus pezones de su encierro, te embisto, dejándote mi olor, mis manos, mi polla grabada.

Sigo una y otra vez saciandome de ti, una y otra vez, haciéndote mía hasta que noto como la corriente se va haciendo más grande, pienso en lo empapada que estas, en tu piel, en tu boca y te sujeto fuerte. Es mi última embestida y me vacío dentro de ti, me doy entero.

Vuelvo a ser consciente y te miro, tus ojos están clavados en mi, sonries. Veo trinfo en tus ojos, sabes que me has hecho perder la cabeza. Jaque mate, la reina gana.