El encuentro

*****i77 Mujer
7.517 Publicación
Autor de un tema Moderador de grupo 
El encuentro
Salíamos con gente conocida en común pero era la primera noche que coincidíamos.
Te vi alto y con una bonita sonrisa.
Estuvimos tomando algo todos juntos y como siempre las risas primaron durante el encuentro.
Apenas hablamos entre nosotros, lo vi normal, no nos conocíamos de nada más que de oídas y del chat del grupo.
Luego nos fuimos al local de siempre y mientras estaba en la barra para pedir, te acercaste también a la barra a mi lado.
¿Qué tal va la noche? Me preguntaste
Te sonreí y contesté con un escueto "Bien"
Me dieron mi copa y salí a fumar a la terraza.
Me senté cansada, al lado del cenicero para descansar los pies y acabé tumbada.
Volviste a acercarte con tu copa y un cigarro.
Al verme te sentaste junto a mi y te estiraste a mi lado.
Giré la cabeza para mirarte.
"¿Te molesta si te acompaño?" Me preguntaste.
"En absoluto" respondí.
Empezamos a charlar y cuando terminé mi cigarro y lo apagué, me tumbé de lado hacia ti.
"Es raro que nunca coincidamos" te dije.
Me hablaste de tus horarios y de que esa semana tenías fiesta.
Te incorporaste y pasaste tu cuerpo y tu brazo sobre mi. Me quedé sorprendida y callada, también un poco nerviosa, hasta que te vi apagando tu cigarro en el cenicero de detrás de mí.
Cuando volviste a tu sitio tu cara pasó cerca de la mía, y besarte pasó por mi mente.
Me senté y empezaste a acariciar mi espalda, como un roce casual, parecía que lo estaba imaginando. Me gustó sentir tu mano sobre mí y un escalofrío de placer me recorrió entera, creo que nadie en el grupo se dio cuenta.
Lo interpretaste como frío y me cogiste entre tus brazos, unos brazos duros y grandes, un pecho en el que apoyarme, cómoda.
Cerré los ojos y pensé en lo bien que estaba así. Me acurruqué y me besaste y por supuesto te devolví ese beso.
Esa lengua jugando con la mía y mis manos en tu cuello.
Nos abrazamos como si quisiéramos atravesarnos y me pediste al oído ir a un sitio más íntimo.
Nuestros amigos entonces se dieron cuenta de que íbamos descalzos, de la mano y riendo.
Nos dieron igual las miradas, las caras de sorpresa y llegamos a una cama donde no tardé en desnudarme esperando que hicieras lo mismo.
Te quedaste desnudo de rodillas mirándome y yo me incorporé a meter tu polla en mi boca, crecía, me cogías de la cabeza y gemías.
Me tumbaste con delicadeza y empezaste a comer mi coño aunque ya estaba empapado de nuestros juegos anteriores.
Te pusiste un condón y me senté a horcajadas sobre ti dejando caer mi peso sobre ti, entonces te noté dentro.
Los dos palpitábamos como si fuéramos uno, yo me movía hacia delante y detrás.
Tu cogías mis nalgas para empujarme aún más dentro de ti.
Mis fluidos salían de tal forma que hacían que tu polla resbalaba fuera, así que con ganas e impaciencia, me giraste, mordí tu cuello y me empalaste de nuevo.
Tu nombre salía de mis labios hasta que los tapabas con un beso largo y húmedo mientras nuestros cuerpos no dejaban de moverse, no querían dejar de hacerlo.
Un grito apasionado salió de lo más profundo de mi y te dejaste caer a mi lado, retirándote con cuidado el condón y preparando tu pecho para resguardarme un ratito más allí.
Cuando salimos nuestros amigos nos esperaban entre risas, gritos y algún comentario divertido, pero nosotros solo podíamos mirarnos a los ojos el uno al otro y mantenernos abrazados.
No era amor, acabábamos de conocernos, pero fue lo más parecido a la última vez que hice algo más que follar.
****Si Hombre
2.334 Publicación
Me encanta la ultima frase. Genial.
Inscríbete y participa
¿Quieres participar en el debate?
Hazte miembro de forma gratuita para poder debatir con otras personas sobre temas morbosos o para formular tus propias preguntas.