Nosotros hemos tenido la oportunidad de hacerlo en campings naturistas. No era un contexto "sexy" pero no se puede negar que siempre existe, velado, un mínimo de ese componente.
Aparte de la sensación de libertad que aporta hacer cualquier cosa sin ropa, objetivamente creemos que favorece muchísimo la práctica del yoga, al observar mejor tu propio cuerpo, respiraciones, simetrías, etc.
Ojalá la ropa sólo para cuando es realmente necesaria.