Reconciliarse con la menstruación
Que conste que no quiero sonar extremadamente positivista. Como persona que menstrúa sé lo ridículo que suena cuestionarse por qué las personas que menstruamos no tenemos buena relación con la menstruación. Cólicos, dolores abdominales, náuseas, vómitos, diarrea, senos sensibles, una montaña rusa emocional impulsada por hormonas, añadido a la evidente incomodidad de un sangrado continuo durante 3 a 7 días… De acuerdo a un estudio realizado por Ausonia, la media de personas que menstruamos lo hacemos cerca de 400 veces a lo largo de su vida de, en promedio, los 12 años a los 50. Además, un sangrado menstrual normal puede expulsar de 30 a 50 ml de sangre (flo health). Agota sólo de pensarlo. Añádele que la media de las personas que menstruamos en España gastamos cerca de 50 euros al año en productos de higiene menstrual, que siguen teniendo un 10% de IVA (menos en Canarias) por no estar considerados productos de primera necesidad. La regla es inevitable, pues los fármacos que la eliminan frecuentemente sólo acarrean más problemas de los que disipan. La mayoría de nosotras vivimos resignadas, pero ¿merece la pena vivir en resignación con algo que es una parte de ti? ¿No impide eso que aceptemos, abracemos y amemos nuestro cuerpo al completo?
Cuando sientas que necesitas reconectar con tu menstruación, colócate en la bañera, sobre una toalla o mismamente de pie y practica el free bleeding (sangrado libre, sin compresa, tampón o copa que lo absorba). Nota cómo la sangre emana de tu vagina, corre por la piel de tus muslos y llega hasta las piernas. Tócala con las manos. Disfruta de su calor. Mánchate con ella. Juega. Coloca tus manos sobre el bajo vientre y ''habla'' a tu útero con afirmaciones como:
- La menstruación es la piedra angular de la vida
- La menstruación me conecta con la naturaleza
- La menstruación me conecta con mi ‘yo'
- La menstruación me conecta con mis ancestras
- La menstruación es un indicador de salud
- La menstruación es un sinónimo de fuerza
Ten también en cuenta que durante el periodo de la menstruación la libido puede ser más intensa, y la sangre hace de lubricante natural para unas relaciones sexuales o masturbaciones estupendas. El orgasmo ayuda a disminuir los cólicos y dolores menstruales debido a la relajación de los músculos del útero, e incluso pueden acortar la duración del periodo ya que ‘’las contracciones uterinas durante el orgasmo pueden acelerar el tiempo que tarda tu revestimiento uterino en desprenderse’’ (flo health).
Te animo de veras a que le des una vuelta a la manera que tienes de relacionarte con tu menstruación, ¿me cuentas en comentarios?
Paula.