Natalia Kim

Ayer me enteré de su fallecimiento.
Nos conocimos a través de una común amiga en el 2001 y, estuvimos durante unos años compartiendo aspectos de nuestras vidas. Yo pasaba temporadas en Madrid y otras en Barcelona.
Sin ahondar en su fantástica vida, se puede resumir leyendo distintos artículos de revistas y periódicos así:

“…periodista sueca afincada en España desde los años setenta que, entre otras muchas ocupaciones, fue la responsable de prensa de las primeras ediciones del Festival Internacional de Cine Erótico de Barcelona. Desde entonces su vida quedó ligada a la industria del entretenimiento para adultos, colaborando con productoras, ferias eróticas y eventos relacionados con el cine X como periodista mientras, en paralelo, continuaba organizando eventos de todo tipo.
Nacida en Suecia, cuando contaba con veinte años dejó un trabajo de ejecutiva en su país y partió con su novio rumbo a Ciudad del Cabo (Sudáfrica) al volante de un Jaguar. Pero se les acabó la gasolina, el dinero y el amor en Barcelona donde ella ya nunca se marchó.
Fue portada de la revista Interviú, rodó un western con Fabio Testi, salió de copas con Maradona, desayunó con Anthony Queen, etc. …“

Profesionalmente yo no pertenecía a su mundo, pero gracias a ella, como una curiosidad conocí un poco el mundo de la canción, los festivales y las buenas y famosas salas porno. Famos@s cantantes de hoy, entonces eran desconocid@s que empezaban a tener trabajo y publicidad, gracias a su intervención con productores amigos suyos. Algunos de es@s cantantes viven hoy día en lujosas mansiones aquí o en América y, ella murió sin esos excesos. Paradojas de la vida.

Ya en 1999 apostó por Internet y sus posibilidades técnicas de llegar al público masa, a través de webs personalizadas, promoción de empresas por internet, redes de amigos, etcétera. Y está claro que su visión fue acertada.

Todas las mañanas sin excepción, se levantaba a las 6 y, mientras desayunaba despachaba emails de todo el planeta, hablaba 8 idiomas, ni más ni menos.
Después de los emails ella y su perrito Gizmo me recogían y, nos íbamos con su descapotable al club náutico a remar. Remar era una de sus pasiones y, la mantenía en forma.

Era una mujer extraordinaria. Luchadora, positiva, encantadora, siempre sonriendo y, sobre todo emprendedora. Siempre estaba imaginando un nuevo proyecto. Hace unos años le detectaron un cáncer de mama y, seguro que no aflojó por eso. Y seguramente que esté donde esté, está organizando algún proyecto.


Sin duda alguna, es de esas personas que te marca para siempre.

Un beso, preciosa alma.