Y tú, ¿hacia dónde vuelas?
Me he dado cuenta que muchas personas vuelan hacia atrás, con el viento en contra, soportando cargas pesadas que les impiden avanzar... preocupadas por encontrar o recuperar cosas que ya se fueron.Otras vuelan hacia delante, pero lo hacen a demasiada velocidad, perdiéndose así las vistas y con un equipaje lleno de ansiedad por saber que sucederá mañana.
Esos vuelos no deberían existir, nos distraen y nos alejan del mejor viaje que tenemos cada día la posibilidad de realizar. El que nos ofrece los mejores paisajes, las mejores experiencias y los más importantes aprendizajes... el más real y el que tenemos ahora en nuestras manos. El del presente, el que no nos deberíamos perder por nada del mundo.
Es tan cierto que lo esencial es invisible a los ojos... debemos sentirnos afortunados porque cada nuevo día es un regalazo que debemos aprovechar. No importa si lo hacemos sólos o acompañados. Eso dependerá de las circunstancias y/o de lo que necesitemos o sintamos en cada momento.
Tú decides... yo tengo muy clara mi elección... Si tu también la escoges, tal vez nos encontraremos por el camino.