Domingo de ramos
“Abismos;a la sombra de tu candela”
14 de Abril del 2019
(Domingo de ramos)
En tu nuca el verbo lamer es el
orgasmo donde se pone el sol
para anochecer en mi lengua.
Una conjugación gramatical que
se muere de sed por desabrochar
el piar de los pájaros de tu blusa.
Un condimento esencial que
invade mi nariz con los azahares
de tu luna gitana, que reclama
un vis a vis en la versión más
indomable que labora en los
andamios de tu espalda.
Te diría que no estás en lo cierto,
que me vuelvo candela si el calor
te pide la cuenta sin dejar propina.
Que soy poco más que una noche
de ausencia rodeada por la pasma.
Un indocumentado más, que
cuando le preguntan si sueña solo
sabe afirmarte abrazado a un
ensañamiento contundente.
Hace tiempo que soy un apátrida sin
luna reclamando tu atención en los
renglones que no te atreves a escribir.
Tratando de traducirme en el abismo
omitido que me saca una navaja
apostada en la frontera de tu norma.
Reparar tus alas podría ser la mejor
manera para poder alcanzarte
cuando olvides dónde mirarte.
Quizás por eso me sigo requemando
en la huella de tus malos modales,
postulándome como un mozalbete
intolerante a la lactosa de tu
aburrimiento. Recordándote en
cada esquina, despistando a la
inquisición de colores fríos que me
vigilan a deshora. Prófugo del violeta
denostado de este catorce de abril
que se gusta en los altares de otro
domingo de ramos.
Por eso, voy a olvidarme en los
calcetines de los lilas, malvas y
morados donde ese sueño se
marchitó esquilmada por los
hangares del cinismo.
Y así, quiero ponerte al frente de
todos ellos y hacerte República esta
tarde, porque para soñar sigo teniendo
suelto y no encuentro otra manera
de improvisar una excusa mejor
para escribirte de nuevo.
Simón de Azzaria