Es muy interesante lo que comentas
@***82
¿Hasta qué punto afecta el porno a nuestra sexualidad?
Sí, afecta, pero el grado depende de muchos factores, entre ellos, emocionales. No tiene tanto que ver con tu edad y tu claridad de ideas como de tu estado emocional.
Voy a intentar describir un ejemplo aunque no sea científicamente correcto para explicarlo, imagina que llevas una temporada muy estresada en el trabajo, que te gusta mucho alguien con el que te lo pasas muy bien y te vas de fin de semana de relax en el que tenéis una jornada de sexo bestial mientras suena en la tele una peli y en el momento de tu orgasmo el actor dice algo muy sensual. De alguna manera, esos dos estímulos quedan unidos y cada vez que oigas algo parecido sentirás excitación porque se liberará oxitocina de forma natural. Si tus niveles de oxitocina, dopamina, etc. están alterados por un periodo de estrés, enfermedad, tristeza, etc. esta liberación automática de oxitocina resultará más placentera y tendrá mayor efecto.
Lógicamente, en el cerebro ultrahormonado de un adolescente, estos efectos son más intensos y sus efectos más permanentes.
Por otra parte, se produce la habituación, es decir, te acostumbras a verlo y cada vez tu cerebro necesitará más porno o un porno más intenso. Esto responde a la adaptación neuronal consistente en la disminución de la respuesta ante un estímulo repetido de modo que buscarás un porno más potente.
No hay nada como recibir permanentemente el mismo mensaje para que termine afectando a tus decisiones. Los publicistas y los políticos lo hacen constantemente.
¿Afecta verlas una y otra vez en el porno más comercial ?
Sí, dado que ya te has habituado a ver esas escenas, buscarás esas misma intensidad en tus relaciones. Ahí intervienen los estímulos supernormales que comenté en una entrada al principio porque a veces, las pautas de acción modal están muy condicionadas por ciertos rasgos del estímulo desencadenante. Me explico...
Los pechos son un atractivo sexual (aunque no está demostrado, la mayoría de estudios parecen certificar que es un rasgo evolutivo). Unos pechos más grandes generan un atractivo mayor. El visionado de porno con pechos gigantes (estímulos supernormales) disminuye la respuesta (excitación) ante pechos naturales (estímulos normales). Por este motivo, la sobrexposición a escenas de sexo más o menos extremo (squirting, sexo grupal, bukkake, etc.) supone una sobrexposición a estímulos supernormales y, por lo tanto, una respuesta menos intensa al estímulo convencional y la búsqueda de esos mismos estímulos.
¿Habría que intentar que nos condicionará lo mínimo posible?
Efectivamente, no nos debe condicionar. El factor personal y psicológico del sexo es esencial y la ausencia de estos factores tanto en el visionado de porno como en el sexting pueden provocar una ruptura entre factor físico y emocional que derive en desórdenes importantes. Algunos psicológicos como depresiones y otros fisiológicos como la disfunción eréctil (que tiene un gran factor psicológico). Lógicamente, todo ello depende de tus relaciones personales, estado anímico, etc.
Vuelvo a poner un ejemplo para explicarme.
En las relaciones BDSM hay una gran liberación de oxitocina y dopamina. Esto supone una alteración del estado mental como el de una droga. Por este motivo, tras una sesión de dominación/sumisión, se debe dedicar un momento al "after care".
Esta parte de la sesión es indispensable para prevenir que la práctica sexual se convierta en crueldad que interrumpe los derechos sexuales de las personas implicadas y tengan cuidados después del sexo. Como he dicho, estas sesiones de sexo tan intensas liberan grandes cantidades de dopamina y oxitocina de manera que el aftercare ayuda a prevenir sentimientos dolorosos o sentirse muy triste después del sexo, un desorden psicológico denominado disforia postcoital o postsexual.