He visitado Mercadona. Ante la carestía de piñas y mangos, he cogido latas de piña en almíbar en bajada de precio. He permanecido en diversos pasillos a la espera disimulando con el teléfono y sólo he conseguido que el vigilante de seguridad me siga y mire fijamente. Creo que el problema es que no hay más clientes...
Ahora en serio, mi aportación se basa en la experiencia trabajando en centros comerciales durante más de 10 años.
Sí, hay gente que va a centros comerciales y/o supermercados con temas relacionados con el sexo.
1. Sí, hay clientes, mujeres y hombres, que flirtean. Mantienen ciertas rutinas de encuentro y hay horas que se nota la llegada de un público diferente.
2. También hay clientes que intentan ligar con el personal. Se me han insinuado abiertamente hombres, mujeres y transexuales.
3. Sí, entre el personal de ciertos centros comerciales existe mucho roce, no es un mito.
4. Los baños de las plantas menos concurridas y las escaleras de servicio son lugares de encuentros casuales. Podéis buscar paginas web dedicadas a ello.
5. Hay profesionales que aprovechan las instalaciones para encontrarse con clientes y son conocidos por el personal.
6. Hay "códigos de contacto". En cierta ocasión, con 20 años, tomándome a la salida de un centro comercial una cerveza antes de volver a casa, una señora de cierta edad me pidió ayuda para llevar su carro de la compra. La ayudé y, al dejarla en el ascensor y marcharme, me preguntó por qué no subía. Al día siguiente, mis compañeros me lo explicaron.
7. A algunos os sorprenderá saber que algunas de esas personas que esperan a la salida del supermercado también "ayudan a llevar la compra" por un módico precio. Y sí, el personal nos damos cuenta y lo comentamos abiertamente con ellos. Me he tomado más de un café con alguno de ellos.
8. Hay muchas jóvenes que visitan centros comerciales para que su "abuelo" le compre un ordenador. Un par de días después, devuelven y transforman el dispositivo en dinero para comprar otras cosas de forma que en la tarjeta de crédito sólo aparece un cargo por la compra de un ordenador.
9. Sí, el timo del ligoteo también existe. Vigilan a clientes que pagan en efectivo y llevan relojes de alta gama. Luego una chica guapa hace de gancho y los atracan. Muchas veces no denuncian para no aparecer en las imágenes de las cámaras de seguridad besándose con la chica.
Volveré en temporada de piña.