Este es otro tema recurrente en el foro. Ya ha salido varias veces en los últimos meses y siempre cuento mi experiencia.
Yo tenía mis fotos en abierto y me vi obligado a esconderlas ya que me reconocieron, e incluso intentaron chantajearme (en un entorno relacionado con mi trabajo).
Evidentemente no lo permití, pero si consiguieron dos cosas. La primera, y más evidente, es que ocultase mis fotos. Me da un poco de rabia, porque es cierto que la gente pasa un poco más de ti, pero a la larga también es cierto que ejerce de filtro y al final llega el que realmente quiere conocerte.
La segunda es algo más delicada. Y es que me di cuenta de que JOY es una aplicación de contactos cada vez mejor posicionada en España y, además, con fama de ser un sitio “donde se folla fácil”. La consecuencia es que, por aquí, hay mucha gente que entra, y sale, sin ningún tipo de interés en el mundo liberal y para los que esto es, básicamente, una alternativa a Tinder.
Lo que quiero decir es que esa percepción que alguno tenéis de “si alguien me ve aquí no pasa nada porque, a fin de cuenta, el también está” yo diría que no es real.
Mi consejo, si me lo permitís, es que si muestras tu cara lo hagas con todas las consecuencias ya que tienes posibilidades, y no pocas, que tu entorno se termine enterando. Y me refiero ese entorno incómodo que querías tener apartado de esta faceta de tu vida: familia, hijos, amigos de tus hijos, vecinos, compañeros de trabajo o, como decíais arriba, el grupo de WhatsApp del colegio.
Y dos últimos puntos contestando diferentes ideas expuestas en post anteriores. Tener las fotos ocultas, o con cara tachada, no implica esconder nada (y mucho menos pareja) ni tener complejo de Orco de Moria.
Dicho todo eso, mi admiración por los que mostráis la cara e intentáis naturalizar vuestra sexualidad sin importaros el que dirán o ser objeto de habladurías.
Yo tenía mis fotos en abierto y me vi obligado a esconderlas ya que me reconocieron, e incluso intentaron chantajearme (en un entorno relacionado con mi trabajo).
Evidentemente no lo permití, pero si consiguieron dos cosas. La primera, y más evidente, es que ocultase mis fotos. Me da un poco de rabia, porque es cierto que la gente pasa un poco más de ti, pero a la larga también es cierto que ejerce de filtro y al final llega el que realmente quiere conocerte.
La segunda es algo más delicada. Y es que me di cuenta de que JOY es una aplicación de contactos cada vez mejor posicionada en España y, además, con fama de ser un sitio “donde se folla fácil”. La consecuencia es que, por aquí, hay mucha gente que entra, y sale, sin ningún tipo de interés en el mundo liberal y para los que esto es, básicamente, una alternativa a Tinder.
Lo que quiero decir es que esa percepción que alguno tenéis de “si alguien me ve aquí no pasa nada porque, a fin de cuenta, el también está” yo diría que no es real.
Mi consejo, si me lo permitís, es que si muestras tu cara lo hagas con todas las consecuencias ya que tienes posibilidades, y no pocas, que tu entorno se termine enterando. Y me refiero ese entorno incómodo que querías tener apartado de esta faceta de tu vida: familia, hijos, amigos de tus hijos, vecinos, compañeros de trabajo o, como decíais arriba, el grupo de WhatsApp del colegio.
Y dos últimos puntos contestando diferentes ideas expuestas en post anteriores. Tener las fotos ocultas, o con cara tachada, no implica esconder nada (y mucho menos pareja) ni tener complejo de Orco de Moria.
Dicho todo eso, mi admiración por los que mostráis la cara e intentáis naturalizar vuestra sexualidad sin importaros el que dirán o ser objeto de habladurías.