Probé varias veces (pocas) lo de ir a locales Swinguer, en España y en otros países, primero en pareja y después solo y al final opté por no ir más ni solo ni en pareja...
Lo que yo detecté, personalmente, es bastante parecido a cómo empezó esta conversación; muchísimos tíos que van a follar, o al menos a intentarlo, por creer que se van a encontrar en mitad de una orgía y seguramente acaben en su cama solos practicando un 5 contra 1 con las imágenes que hayan logrado retener en su cerebro. Al principio lo veía "medio normal", total; mi pareja y yo éramos inexpertos y tampoco sabíamos muy bien lo que ahí se cocía y la mayoría de tíos se distanciaban después de lanzarles una mirada que no daba lugar a la confusión... Supongo que la mirada era bastante clara. Creo que a los hombres así les saldría más económico contratar los servicios de una profesional, honestamente.
En mi (o nuestro) caso lo peor que encontramos fueron las mujeres a las que rechazábamos. Miradas de asco, palabras malsonantes que no voy a reproducir, "pues no sois tan guapos eh" y un largo etc. de despropósitos como si de algún modo creyesen que estábamos obligados a irnos con ellas. Eso si me impacto más porque tenía interiorizado que las mujeres (si, ya sé que estoy generalizando y también sé que no todos somos iguales y que en todas partes hay de todo) entendían mejor que nadie que un NO es un NO. Pero estaba equivocado y eso me impactó bastante.
Creo que en general hay que entender que por más que el sexo nos flipe eso no implica que nos tenga que gustar cualquier persona, sea mujer u hombre, igual que nosotros no vamos a gustar por igual a todo el resto de la humanidad. Lo de estar en un local Swinguer o incluso en esta misma plataforma no significa que nos queramos acostar con cualquiera que nos dirija la palabra...verdad? Al menos yo no! Y si mi acompañante pensase diferente a mi, no creo que me acompañase muchas más veces.
En mi opinión lo mejor es conocer a alguien donde sea, hablar, provocar, desnudar y desnudarse mentalmente, hacer que el deseo crezca, concretar unas normas esenciales... Creo que al final la recompensa bien merece la pena de ese pequeño "esfuerzo" porque para recibir placer es importante saber darlo. Las prisas no acostumbran a ser buenas consejeras, aunque para gustos los colores...
Lo que yo detecté, personalmente, es bastante parecido a cómo empezó esta conversación; muchísimos tíos que van a follar, o al menos a intentarlo, por creer que se van a encontrar en mitad de una orgía y seguramente acaben en su cama solos practicando un 5 contra 1 con las imágenes que hayan logrado retener en su cerebro. Al principio lo veía "medio normal", total; mi pareja y yo éramos inexpertos y tampoco sabíamos muy bien lo que ahí se cocía y la mayoría de tíos se distanciaban después de lanzarles una mirada que no daba lugar a la confusión... Supongo que la mirada era bastante clara. Creo que a los hombres así les saldría más económico contratar los servicios de una profesional, honestamente.
En mi (o nuestro) caso lo peor que encontramos fueron las mujeres a las que rechazábamos. Miradas de asco, palabras malsonantes que no voy a reproducir, "pues no sois tan guapos eh" y un largo etc. de despropósitos como si de algún modo creyesen que estábamos obligados a irnos con ellas. Eso si me impacto más porque tenía interiorizado que las mujeres (si, ya sé que estoy generalizando y también sé que no todos somos iguales y que en todas partes hay de todo) entendían mejor que nadie que un NO es un NO. Pero estaba equivocado y eso me impactó bastante.
Creo que en general hay que entender que por más que el sexo nos flipe eso no implica que nos tenga que gustar cualquier persona, sea mujer u hombre, igual que nosotros no vamos a gustar por igual a todo el resto de la humanidad. Lo de estar en un local Swinguer o incluso en esta misma plataforma no significa que nos queramos acostar con cualquiera que nos dirija la palabra...verdad? Al menos yo no! Y si mi acompañante pensase diferente a mi, no creo que me acompañase muchas más veces.
En mi opinión lo mejor es conocer a alguien donde sea, hablar, provocar, desnudar y desnudarse mentalmente, hacer que el deseo crezca, concretar unas normas esenciales... Creo que al final la recompensa bien merece la pena de ese pequeño "esfuerzo" porque para recibir placer es importante saber darlo. Las prisas no acostumbran a ser buenas consejeras, aunque para gustos los colores...