„Este tema en realidad ni es blanco ni negro, es todo un arcoiris. Y todos los participantes tienen razón en lo que dicen.
1) Yo sí soy exigente. Pero tengo experiencia en los rechazos. En Tinder o Meetic empecé dándole like solo a las chicas que me gustaban de verdad, pero me pasaba horas porque nunca gastaba los 50 likes gratuitos. Debido al nulo éxito, pasé a dar like a chicas con las que no estaría mal pasar una noche. Otra vez debido al nulo éxito, a partir de ahí vas bajando el listón.
Otro dato importante que no sé si conocéis las mujeres, puesto que no creo que estéis mirando perfiles de otras mujeres.
Soy nuevo en esta app, la opinión es de otras app de ligar, ya mencionadas. Aquí he visto perfiles más o menos elaborados. Pero las otras hay perfiles, sin foto, sin descripción, fotos de paisajes y animales, fotos borrosas, fotos de espaldas. Las descripciones si hay suelen ser para exigir al hombre un perfil detallado, que sean educados, si quieren sólo sexo fuera... Pero le hablas educadamente, un saludo original y nada. Cómo esperas encontrar un hombre adecuado si no siquiera pones tus gustos y unas fotos que te describan. Algunas están practicando algún deporte o algún hobby y al menos puedes tener una conversación inicial. Pero claro, no hay respuesta.
2) Obviamente, todo el mundo lo hace.
3) Generalmente no. Yo creo que les funciona a los que en la vida real también tendría éxitos. Usan su atractivo sea cual sea, algunos juegos psicológicos y ala, pa'l bote. Pero siempre con la técnica del arrastre. Luego los que triunfan se lo dicen a los demás y quieren probar suerte.
En realidad, es un círculo vicioso. Cómo las mujeres pasan de los hombres, se dedican a la pesca de arrastre. Las mujeres reciben más proposiciones y pasan más todavía. ¿Qué fue antes el huevo o la gallina?
Quizá si dieran una oportunidad a los hombres estaríamos todos más satisfechos. Todavía no he ido muchas veces a un club liberal pero he tenido dos experiencias opuestas.
Mi primer día en un club coincidí con una pareja, 20 años más mayores que yo. Físicamente no me atraían nada. Pero me vieron cara de pichón y decidieron darme una oportunidad. Yo acepté, pensé que podría ser una buena experiencia. Pero al empezar el tema no hubo conexión, además de mis nervios, y la pareja decidió dejarlo estar.
Mi segundo día en otro club, una pareja de unos 15-20 años más que yo. Físico nada atractivo para mí. Pero una vez en lío, se portaron tan bien, me hicieron sentir tan a gusto, todo fluyó y la pareja también disfruto sobremanera. Así me lo comunicaron. Una tarde inolvidable.
Conclusión: si diéramos más oportunidades, nos encontraríamos muchos buenas sorpresas. Los hombres en realidad más que el sexo quieren la validación, sentirse deseado igual que las mujeres. En mi caso al menos, con la primera pareja me sentí bien. Se intentó pero no funcionó. No te quedas con la duda o la frustración. Será que por mi poco éxito tengo otra perspectiva, pero si una mujer se me acerca y me pide tomar un café aceptaría. Os conocéis un rato y si la cosa va mal pues a otra cosa, y si va bien quizá llegues a algo maravilloso.
Salvo por las experiencias en el club liberal (yo aún no he tenido ninguna) y por la fluidez y corrección de palabra, yo mismo podría haber escrito esta publicación.
MUCHAS GRACIAS por ponerle palabras a mi experiencia.