Es un tema bastante interesante, aportaré mi pequeño granito de arena (es el chico quien escribe), como persona que ha recibido fotocoños/videocoños no deseados, y que ha hablado con enviadores profesionales de fotopollas (me enorgullezco de no haberlo hecho nunca).
Siempre me he preguntado qué empuja a un individuo a mandar una fotopolla sin preguntar, porque las veces en las que he pensado en ello, me daba vergüenza sólo pensar en hacerlo (y no soy una persona vergonzosa). Sobre todo me hacía la pregunta del post "de verdad alguien liga así? Si lo hacen es que alguna vez tendrá efecto, pero no se me ocurre a quién le podría poner eso si no hay ya un conocimiento previo de que le gusta que lo hagan".
Las contadísimas veces en las que he podido hablar del tema con alguien, he llegado a la conclusión de que es una especie de falta de empatía y de saber hacer, más propia de un niño que empuja a la chica que le gusta y no sabe llamar su atención que de un adulto. Excepto si tenemos en cuenta que un adulto y un niño sin padres se diferencian en poco más que la estatura en demasiadas ocasiones.
Esas personas con las que he hablado no comprendían (de forma no irónica) cómo a una mujer heterosexual podía no gustarle ver un rabo... Existe gente a la que le resulta sorprendente que pueda no resultarle atractivo a alguien un rabo borroso, en mal ángulo y quemado por el flash, asombroso. Pero principalmente, un rabo que no ha pedido ver. En una ocasión llegué a poner el ejercicio de imaginación extrema de que se imaginase a una octogenaria que no hace más que hablarle y que le manda imágenes de sus genitales sin que él quiera ni verle la cara, para intentar forzar una situación que le resultase desagradable, y entonces, !revelación! esa misma puñetera sensación de aversión y desagrado es la que tú puedes generar en otros, por muy guapo y atractivo que te creas. Se quedó como nos quedamos todos cuando nos dicen que el spin del electrón es +-1/2, no te entra en la cabeza cómo puede ser así, pero así es.
En cualquier ámbito de la vida, hacer algo que otra persona no quiere que hagas no le va a resultar agradable, no debería ser tan difícil de comprender. Pero una necesidad de llamar la atención sin tener empatía y/o una educación a la hora de acercarte a las personas a las que quieres atraer, pueden derivar en comportamientos de este tipo.
No sé por qué pasa más en hombres, pero en mi caso, aunque no me sentí violentado en mi experiencia de las fotos no deseadas, mínimo no me resulta atractivo, y me generó cierto rechazo. Y aunque era una chica de nuestra edad y que por simple imagen nos habría gustado, dejó de resultarnos atractiva con ese comportamiento a ambos.
Hasta aquí mi disertación innecesariamente larga, ya sabéis algo más de mi: no escribo más en los foros para que no me echen de Joy, duraría dos telediarios.
Un saludo!