„„¿El paradito activo?
¡Buenas tardes!
Hace poco leí algo en un post de redes sociales que me dejó pensando y que justo este fin de semana me ha pasado, como si la ocasión se me hubiera presentado para corroborar mi teoría.
Supongo que todos a lo largo de nuestra vida sexual nos hemos encontrado con esa persona que a priori es tímida y “paradita” y después te deja con las piernas temblando. Y al contrario, hemos conocido al seguro de sí mismo, echado para adelante que promete solo con su actitud y a la hora de la verdad es un muñeco a pilas?
Mi pregunta es:
¿creéis que hay una relación directa entre ser “paradito” y sexualmente activo y al contrario?, ¿o pensáis que es cosa de las expectativas de cada uno y de prejuzgar, para bien o para mal, solo con ver a la otra persona?
Cuando el encuentro es más de lo que esperamos es sorprendente y grato. Cuando el encuentro es menos de lo esperado, fácilmente podemos salir chasqueados, así que sí, pienso que hay relación con las expectativas, como en el resto de áreas de la vida.
Por otro lado, no podemos achacar lo que sentimos a una única variable.
Por mi parte, pienso que también entran los permisos y la postura social que creemos que debemos/nos han enseñado a adoptar en esas situaciones.
Tal vez al machito faldero, le han enseñado que debe demostrar (hablar de) fuerza o habilidad, aunque no posea tal grado, para defenderse en esta sociedad o porque así llama más la atención de las chicas y acaba teniendo más experiencias, gratas o no (ahí no entro).
Por otro lado están los tímidos, mantienen un perfil más bien bajo de atención y viven más en sus adentros. Muchos no saben como acercarse a las personas, porque no tienen las herramientas, no quieren molestar, creen que se burlarán de ellos y demás ideas de inseguridad o temor que ronden sus cabezas.
Al final, es un tema de permisos y seguridad, entonces, cuando una persona se siente segura de expresar todo su ser, con total libertad, saca a la bestia que tenía retenida por todo el mundo de barreras mental que tenía (persona tímida).
También me viene a la mente el tema del perfeccionismo, tal vez una persona más echada hacia delante no tenga miedo de experimentar aunque no posea las habilidades necesarias en ese momento (tirarse a la piscina) y así ir aprendiendo. En cambio a las personas tímidas nos preocupa bastante quedar en ridículo o ser despreciados, por tanto preferimos informarnos o prepararnos en base a nuestra concepción perfeccionista de como se tiene que ser en cada situación, y así poder entrar a la piscina con al menos la seguridad de no ahogarnos y mantenerse a flote.
Pienso que la clave es la seguridad. Aunque seas tímido o no, el objetivo es disfrutar en la medida que se pueda.
Al menos así lo percibo yo.
Realmente el ser tímido o más gallito no determina el desempeño real en la cama. Aunque merece la pena esperar a ver el resultado in situ, porque ''dime de que te jactas y te diré de qué careces''.
No soy psicólogo, sólo un chico tímido random
En definitiva: con el refranero español podríamos dominar el mundo si quisieramos.
Estoy muy de acuerdo con que el objetivo es disfrutar, dejarse llevar y sorprender.