El primer mes del perfil recibí poco más de 1.000 visitas, todas vinieron acompañadas de un email o más, era la novedad de un culo nuevo por estos lares.
De esa media de 33 emails día, una media de 27 empezaban con un “hola”; 5 con un “hola que tal?”, y 1 solo, se presentaba y saludaba “según los cánones actuales”. El 99% son hombres, en un mes sólo 2 mujeres, y varias parejas para el típico trio español de un hombre contra dos mujeres…😉
Yo contesto a todos, si me dejo alguno en el camino, es por despiste y porque no puedo dedicar más de una hora al día a Joy, y que me disculpe desde aquí. La conversación típica es, y transcribo una de esas:
• hola
• Hola. – respondo
• que tal / k tal / como vas / – sin acentos y sin interrogaciones (no pasa nada…cada uno tiene lo que tiene)
• Bien, gracias. Y tú? – respondo
• me gusta tú culo / me gustan tus fotos / me gustaría charlar contigo / quedamos? / …
• Muchas gracias. – respondo
Y continúo la charla si me atrae su perfil o su conversación, o bien, educadamente me despido explicándole por qué no me gusta. Sistemáticamente tanto aceptados como rechazados, me dan las gracias por responder más pronto o más tarde, y los rechazados no se convierten en pesados que vuelven a insistir.
Yo me considero una persona culta por la sólida formación que me dieron mis padres y profesores, y que he continuado luego por mí misma.
De la mayoría de las personas que conozco por estos medios, la mayoría no ha recibido enseñanza superior, ni ha llegado a leer por sí misma más de 5 libros en su vida (esto lo sé, porque cuando entablo conversaciones ya un poco profundas, lo voy preguntando para ver el nivel de ese contacto). La mayoría tienen una cultura de blogs, de videos, de concursos, de telediarios, y cosas parecidas, en las que la mayoría de las fuentes no son serias, con lo cual no le puedes pedir peras al olmo, aunque a ese olmo lo quieras/ames/desees de una manera u otra.
Yo iba de sobrada por la vida, y un día de vacaciones en España, en concreto en la Sierra de Málaga, me tope en una cena de un pueblo pequeñito, al lado de Antequera, con un campesino de esos de habla “cerrada”, y que no sabía quien era Quevedo y mucho menos Goethe, pero…le encandilaban las estrellas. ¡Y de eso tenía una señora biblioteca!, y no solo eso, me llevó fuera del pueblo donde se veía de maravilla el cielo, y empezó a enseñarme estrellas con sus nombres, tamaños, características, etc… Y consiguió enamorarme ese verano, y sobre todo, darme que pensar sobre “los incultos” que no saben escribir bien, ni leen libros, ni hablar bien, etc.
Me acordé de una frase española que me resultó simpática y que muy real, y que también se puede aplicar a este mundo virtual: “ningún cagao se huele”.
También se puede aplicar lo que decía un profesor mío: “El dinero y la humildad, son recursos siempre escasos”.
Yo soy trabajadora privilegiada de “cuello blanco”, pero desde que conocí al “inculto de las estrellas”, no miro por encima del hombro a nadie de “cuello azul”.
Y si yo me considero más cultivada, me veo en la obligación de tener respeto y ayudar a quien no esté cultivado. Siempre que nadie me falte el respeto, y por mi experiencia en Joy España hasta ahora nadie lo ha hecho. Al contrario, me siento muy bien tratada por todos los chicos de Joy España, tanto de Madrid, Barcelona y Andalucía, que son los sitios donde suelo venir de vacaciones desde hace años. En algunos casos seguro que ellos me tratan mejor a mí, que yo a ellos. No paso más de una hora al día en Joy, y eso también hace que vaya con prisas. Si no he sido correcta con alguien que me lo diga y Perdón desde aquí…
A veces, un diamante acaba siendo áspero como una lija, y un trozo de granito suave como el terciopelo.